
En el camino hacia la maternidad, las parejas de mujeres encuentran en el método ROPA una solución innovadora que les permite compartir de manera única el proceso de traer un hijo al mundo. Esta técnica de reproducción asistida, legal en España y cada vez más extendida, posibilita que una de las mujeres aporte los óvulos y la otra geste el embarazo, integrándolas plenamente en la experiencia de ser madres.
‘’Es un proceso muy bonito y especial para las dos, más inclusivo, sin quitarle importancia a otro tipo de técnicas como la fecundación in vitro o inseminación artificial a la que se someten otras mujeres’’, señala Claudia Arcega, embrióloga y antigua directora del laboratorio de la Clínica Aisa de Zaragoza.
Según explica el doctor Francisco Bujalance, ginecólogo de la Clínica de Reproducción Asistida Ginemed Sevilla, el método ROPA (Recepción de Ovocitos de la Pareja) es una variante de la fecundación in vitro (FIV). "El procedimiento comienza con la estimulación ovárica de una de las mujeres, lo que permite desarrollar un número mayor de óvulos de lo habitual. Estos son extraídos mediante punción ovárica, fecundados en el laboratorio con semen de un donante y transferidos a la otra mujer, quien será la madre gestante", detalla.
Una técnica para compartir la maternidad
El principal atractivo del método ROPA radica en la posibilidad de compartir la maternidad de forma activa. "No solo es un tratamiento idóneo para parejas de mujeres, sino que también ofrece soluciones para casos específicos, como cuando una mujer no puede gestar, pero desea tener un hijo con sus propios óvulos gracias a la colaboración de su pareja", señala el especialista.
El tratamiento, que dura aproximadamente 20 días desde el inicio de la estimulación hasta la transferencia del embrión, se realiza tras una evaluación médica exhaustiva. "Es fundamental realizar una historia clínica completa, ecografías ginecológicas y análisis específicos para optimizar las probabilidades de éxito", añade.
España, pionera en la técnica
El experto de Ginemed mantiene que el método ROPA se llevó a cabo por primera vez en el mundo en España entre 2008 y 2009, y desde entonces ha permitido que miles de parejas puedan formar familias. Este avance cuenta con el respaldo de la legislación española y ha sido un ejemplo internacional en el campo de la reproducción asistida.
Más allá de lo genético
Aunque el material genético proviene de la madre donante y del donante de semen, la madre gestante desempeña un papel crucial. "El embrión se desarrolla en su útero, y factores como la epigenética modulan la expresión de los genes, lo que aporta un vínculo biológico único con el bebé", explica el doctor Bujalance.
Riesgos controlados y personalización del proceso
Como en cualquier procedimiento médico, existen riesgos potenciales, como reacciones adversas a la medicación o problemas de hipertensión durante el embarazo, pero la mayoría se pueden prevenir con un adecuado seguimiento médico. Además, el método permite una gran personalización: las parejas pueden decidir quién será la madre donante y quién la gestante, e incluso alternar roles en futuros ciclos, si así lo desean.

