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Canciones ocultas en discos famosos: esto no lo hace Spotify

Varias bandas han incluido a lo largo de su historia pistas escondidas en sus álbumes físicos que aún hoy sorprenden a los oyentes más atentos.

Actuación de Green Day en O Son do Camiño 2024. | Son do Camiño / Javier Bragado

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Prohibido Contar Ovejas: Canciones ocultas. Los secretos mejor guardados de tus discos favoritos
Prohibido contar ovejas

Las canciones ocultas fueron durante años uno de los recursos más utilizados por las bandas para sorprender a sus seguidores. Lejos del consumo actual en plataformas digitales, estos temas no aparecían listados oficialmente en los discos, pero se encontraban en lugares poco habituales: tras largos minutos de silencio, en pistas separadas sin numerar o incluso en espacios previos al primer track.

El programa Prohibido contar ovejas, de esRadio, presentado por Felipe Couselo, ha recuperado una selección de estas canciones escondidas que marcaron a toda una generación.

El auge del "hidden track" en los formatos físicos

Desde finales de los años 80 hasta principios de los 2000, muchas bandas aprovecharon los límites del formato físico –CD, vinilo o EP–para incluir canciones sin identificar. En ocasiones, se añadían pistas adicionales no listadas en la contraportada. En otras, se ocultaban dentro de una misma canción mediante largos minutos de silencio antes de su aparición. También existía la técnica del "pre-gap", que permitía ubicar un tema antes del primer track oficial, accediendo a él rebobinando desde el inicio del CD.

Uno de los ejemplos más característicos fue el álbum More Than You Think You Are (2002) de Matchbox Twenty. Aunque el disco cerraba oficialmente con The Difference, tras unos minutos de silencio se incluía el tema So Sad, So Lonely, acompañado de sonidos de estudio y conversaciones. Esta práctica era habitual en la época, aunque actualmente cuesta localizar estas canciones en plataformas como Spotify.

Bandas que convirtieron las canciones ocultas en tradición

Placebo es otro ejemplo de banda que utilizó de forma recurrente las canciones ocultas. En discos como Black Market Music aparecían pistas como Black Market Blood tras largos silencios. También en Sleeping With Ghosts o Without You I’m Nothing se incluían temas no listados como Evil Dildo o Special Needs, siempre con el mismo patrón: una pista final de duración anómala, silencio prolongado y aparición inesperada del tema.

En el caso de Green Day, el tema All By Myself se convirtió en uno de los más recordados entre sus canciones escondidas, mientras que Travis incluyó Blue Flashing Light en su álbum The Man Who (1999) como cierre no anunciado. La banda escocesa repitió esta fórmula en álbumes posteriores como The Invisible Band (2001), 12 Memories (2003) o The Boy With No Name (2007), con canciones añadidas en ediciones especiales o mercados concretos como el japonés.

Del anonimato al reconocimiento internacional

Algunas canciones ocultas llegaron a adquirir relevancia propia. En The Miseducation of Lauryn Hill (1998), la versión de Can’t Take My Eyes Off You no aparecía en el listado original, pero acabó siendo tan popular que se incluyó en pegatinas promocionales del disco y terminó ganando un premio Grammy. En el mismo álbum se incluía también Tell Him, otra pista no anunciada.

Otros casos reseñables fueron los de Jagged Little Pill (1995) de Alanis Morissette, con Your House como canción a capella escondida; o Send Away the Tigers (2007) de Manic Street Preachers, que finalizaba con una versión de Working Class Hero de John Lennon. Esta banda ya había recurrido a este recurso en álbumes anteriores como Know Your Enemy o en recopilaciones como Lipstick Traces, en las que se incluían versiones, demos o grabaciones en directo no mencionadas en la contraportada.

Versiones, rarezas y homenajes inesperados

Los discos también han servido para rendir homenajes o lanzar guiños a los seguidores más fieles. El EP Broken (1992) de Nine Inch Nails incluía dos pistas ocultas –Physical (You're So) y Suck en las pistas 98 y 99 del CD. Su autor, Trent Reznor, ha mostrado siempre interés en explorar las posibilidades de cada formato físico, tanto en la música como en lo visual o incluso en el merchandising.

Otros artistas como Crowded House incluyeron I'm Still Here como cierre no anunciado de su disco Woodface (1991). En su reedición por el 25 aniversario, la canción fue publicada de forma íntegra. Afghan Whigs cerraba su álbum Congregation (1992) con Miles Is Dead, también oculta en su edición original.

Nirvana y la canción oculta por excelencia

Una de las pistas ocultas más conocidas es Endless, Nameless de Nirvana, incluida al final de Nevermind (1991). Tras Something in the Way, y después de varios minutos de silencio, sonaba este corte inesperado que no aparecía listado en las primeras ediciones del disco. El grupo repitió la fórmula en In Utero y en otras publicaciones, consolidando esta práctica como parte de su identidad sonora.

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