
El explanada del muelle de la Academia Naval Militar de Marín (Pontevedra) ha sido este miércoles el escenario de un acto histórico y emotivo. A la tradicional entrega de Reales Despachos a los alumnos de la Armada y la Infantería de Marina que concluyen su proceso formativo tras cinco años en el centro, se ha unido el acto formal de despedida de la Princesa de Asturias, Leonor de Borbón, que deja el centro militar tras un año de formación marinera.
La heredera de la Corona concluye así su segundo año de formación militar, tras su paso el año pasado por la Academia General Militar (AGM) de Zaragoza. Un año que ha contado con el bautismo de fuego marinero que supone el crucero de instrucción en el buque-escuela Juan Sebastián Elcano –en el que ha estado cinco de los seis meses– y la experiencia de estar un mes a bordo de una fragata operativa, la F103 Blas de Lezo.
Un momento especial en el que no sólo ha estado el rey Felipe VI, que preside cada año la entrega de Reales Despachos en las academias militares, sino en el que también han estado presentes la reina Letizia y la infanta Sofía, que ya ha regresado a España tras finalizar el curso académico en el centro de Reino Unido en el que los realiza. No se perdieron su salida de la academia de Zaragoza y tampoco se han perdido la de academia de Marín.
Presentes han estado también la ministra de Defensa, Margarita Robles, o el Almirante Jefe del Estado Mayor de la Armada (AJEMA), almirante general Antonio Piñeiro Sánchez. Junto a ellos, otras autoridades civiles y militares como el presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda.
Los familiares de los nuevos oficiales de la Armada y la Infantería de Marina han empezado a poblar el área reservada para ellos sobre las 10.30 horas de la mañana. La Familia Real ha llegado pocos minutos antes de las 12.00 y, tras saludar a las autoridades, se han dirigido hacia la Tribuna Real. Ha sido el momento de los honores militares, tras lo que ha sonado el Himno Nacional acompañado por 21 salvas de cañón, que marcan la presencia del Rey en el acto.
Concluido el protocolo inicial, ha llegado el gran momento de la jornada. El Monarca le ha entregado a Leonor de Borbón el diploma acreditativo que la reconoce como guardiamarina de segundo y le ha hecho entrega de la Gran Cruz al Mérito Naval con distintivo blanco. Momento en el que Felipe VI se ha saltado el protocolo para darle un breve abrazo y un apretón de hombros, en clara señal de orgullo, afecto y complicidad.
Tanto el nombramiento de la Princesa de Asturias como guardiamarina de segundo como la entrega de la medalla había sido aprobado horas antes por el Ejecutivo, siguiendo las pautas de los establecido en el Real Decreto específico que desarrolla cómo va a ser la carrera militar de Leonor de Borbón. También Felipe VI, entonces como Príncipe de Asturias, recibió la alta condecoración el día que abandonó la academia de Marín.
Superado ese momento, el acto ha continuado con la entrega de Reales Despachos a los nuevos oficiales de la Armada y la Infantería de Marina, que han ido uno a uno recogiendo el título que acredita su paso por la academia. Ha sido el turno entonces a una breve intervención del general director de la academia, que ha dado paso a un sentido homenaje a los caídos, que ha incluida la emotiva La muerte no es final.
El acto ha concluido con el tradicional "¡Rompan filas!", tras el que los batallones de alumnos se han dispuesto para participar en una pequeña parada militar que ha producido entre los fuertes aplausos del más de millar de familiares que no han querido perderse el acto con el que culminan los cinco años en la academia militar de su familiar.

