Los Lakers consiguieron en el Staples Center sacarse la espinita del anterior enfrentamiento ante los Heat. En Miami, el equipo de Los Ángeles jugó uno de sus peores partidos de la temporada, donde perdió de 24 puntos pese a la baja aquel día de Dwyane Wade, por lesión. Miami Heat esta vez no tuvo a Chris Bosh, ausente por el fallecimiento de su abuela, pero la victoria de los Lakers fue inapelable.
El pivot español reconoció la dureza del partido por parte de los Heat. "Tenían que intentar ser físicos", declaró Gasol, "sacarnos de nuestra zona de comodidad. Han jugado un partido duro, bueno dentro de sus posibilidades, pero nosotros hemos mantenido bien el cuerpo y la mente, y hemos podido controlar bien el partido y conseguir una victoria importante".
Uno de los momentos claves del partido vino al finalizar el tercer cuarto, cuando Gasol se encaró con LeBron James en un arrebato poco habitual. El jugador de los Lakers explicó el incidente, saldado con técnicas para ambos jugadores. "Vi que (LeBron) golpeó con el codo, o empujó, a Troy (Murphy), y llega un momento en el que tienes que decir ‘basta’. Los árbitros no le dieron importancia, y entonces tienes que forzar el asunto un poco y hacerles entender lo que está pasando". Gasol añadió también que "llega un punto en el que si los árbitros no utilizan el silbato, tengo que intentar luchar y mantener la posición, como él estaba haciendo".