El 7 de octubre de 2002, en un partido de la sexta jornada de la Liga portuguesa en el estadio José Alvalade, Cristiano hizo el 2-0 ante el Moreirense. Luego marcaría otro gol más.
La cadena francesa, con muy poco tacto, mezcla lo ocurrido en el 1-O con un Clásico ficticio entre Real Madrid y FC Barcelona, donde Mariano Rajoy también tiene su cuota de protagonismo.