La ilusión de la afición del Athletic por llegar a otra final de la Copa del Rey era evidente y más teniendo en cuenta que, a priori, estaban situados en el lado del cuadro que más opciones de les daba. No es lo mismo pelear con Real Madrid y Barcelona por un sitio en la final que hacerlo con un rival de menos potencial económico como Osasuna. Aún así pasó el cuadro rojillo y el Athletic se tiró de los pelos por las grandes ocasiones de gol que tuvo y no materializó.
Uno de los jugadores que más ocasiones tuvo para marcar fue el menor de los hermanos Williams, Nico, que lo intentó absolutamente todo para marcar. El joven jugador rojiblanco, siempre atrevido y valiente de cara a portería, no tuvo su noche, pero lo intentó por activa y por pasiva buscando lo mejor para su equipo. Por eso son todavía más indecentes los comentarios que le llegaron vía redes sociales.
Ante el aluvión de críticas, amenazas e insultos de todo tipo que recibió Nico, el jugador vasco tomó la drástica decisión de cerrar su cuenta de Instagram y lo hizo solo días después de haber cerrado la de Twitter.
Iñaki, hermano de Nico, defendió a su compañero de equipo justo después del partido: "Más que nadie sé lo que pasa cuando fallas y sé lo que estará pasando mi hermano. En la vida se pierde más que se gana y no queda otra que esforzarse y seguir trabajando. Mi hermano tiene muchísimo futuro y esto le servirá de aprendizaje. Es momento de tirar hacia delante".
Este es otro ejemplo de lo dañinas que son las redes sociales actualmente. Seguramente el Athletic tome medidas y apoye a su joven jugador en las próximas horas.