El gimnasio Mad Sport Academy de Madrid, situado en la zona este de la capital (metro Suanzes), fue escenario el pasado sábado 15 de octubre de un día absolutamente histórico para el muay thai español con la visita a nuestro país de Samart Payakaroon y Dieselnoi Chor Thanasukarn, las dos mayores leyendas de la historia este deporte.
Fue un seminario espectacular, organizado por la empresa Bang Rajan Events, al que acudieron nada menos que 150 alumnos, así como el gran maestro Arjan Pratín Sukchamroen (de 91 años de edad), el maestro español Mario Vega del Rosario —conocido como El Patrón—, la artista francesa Lauréne Fernández y la embajadora de Tailandia en España, Phantipha Iamsudha Ekarohit.
Uno de los momentos más emotivos del acto fue cuando Dieselnoi y Samart recibieron el Cinturón de Diamantes de la WBC, el cinturón más prestigioso de la organización que ha sido entregado sólo seis veces en toda la historia.
Carlos Sánchez Gutiérrez, director de Bang Rajan Events y responsable de este día de ensueño para el muay thai, ha contado en una entrevista a Libertad Digital cómo se vivió la fiesta del deporte nacional de Tailandia también conocido como el arte de las ocho armas.
Entrevista a Carlos Sánchez
P: ¿Qué supone la llegada a Madrid de Samart y Dieselnoi, las dos mayores leyendas del muay thai?
R: Para mí es haber logrado un sueño. Cuando me propuse la misión de acercar el mejor muay thai del mundo a la gente, tenía grandes aspiraciones y sueños, algunos más difíciles que otros. Lo más difícil era conseguir que viniera Samart, y encima lo ha hecho acompañado de Dieselnoi; es quizás el logro personal más importante desde que empecé con esto. Si tuviera un álbum del muay thai, sería el cromo dorado sin duda. Me doy por satisfecho con esto: ahora viene un descanso para luego seguir trabajando.
P: Dieselnoi estaba visiblemente emocionado al recibir el Cinturón de Diamantes de la WBC. ¿Cómo viviste ese momento?
R: Fue una reivindicación histórica. Comprendo la emoción de Dieselnoi porque, a pesar de ser el luchador más temido de la historia del muay thai, no tenía más que un solo título porque no había muchas oportunidades de pelear contra él. Era el rival a evitar debido a su letalidad y nadie en su sano juicio apostaría en Tailandia en su contra. Dieselnoi se retira con el Cinturón de Lumpini como campeón de por vida por ser imbatido. Nadie en tres años se atrevió a retarlo. Y ahora, varias décadas después, viene a España, donde el muay thai es un deporte minoritario, con expectativas de dar una master class y de pronto se ve delante de uno de los honores más grandes del muay thai, el cinturón de Diamantes de la WBC con su cara, entregado sólo seis veces en toda la historia. Era algo que ni él ni Samart se esperaban: pero a diferencia de su compañero, que sí que lo ganó todo, para él era su segundo gran título. Te puedo asegurar que absolutamente nadie en el mundo se merecía más esos títulos que Samart y Dieselnoi. El factor sorpresa fue determinante y los que entendimos el momento no pudimos contener las lágrimas.
P: Samart Payakaoon es considerado el mejor de toda la historia, quizá incluso algún paso por delante de Dieselnoi. ¿Cómo es la leyenda de cerca?
R: Me sorprendió muchísimo. Samart tiene un gimnasio en Tailandia, ha sido cantante, actor de cine, ahora tiene una serie que sale o está por salir en Netflix, sale constantemente en televisión y hasta tiene una película sobre su vida, así que goza de un aura de súper estrella mediática. Pero de cerca es una persona sencilla, agradecida, risueña... ojo que él sabe muy bien quién es, pero es alguien muy cercano, nada pretencioso. No habla inglés, pero contamos con la ayuda de Mario Vega, que hizo de traductor, y toda su charla fue de agradecimiento, expresando su satisfacción por estar en Madrid, sus ganas por volver pronto y, por supuesto, de que lo visitemos en Tailandia.
P: Cuando Bang Rajan Events decide hacer un evento de esta categoría, ¿cuáles son los retos más duros a los que se enfrenta ?
R: Sin duda el punto más frágil es mi humanidad, cuando me ven en un evento me ven muy seguro. Han sido tres horas, pero para llegar a esas tres horas se ha trabajado muy duro durante casi todo un año, pasando miedos, ansiedad, nervios e inseguridades, además de vivir en un constante estado de alarma por todo lo que está ocurriendo en el mundo: la subida de los combustibles te encarece el precio de los billetes aéreos, que si hay rebrotes de covid, que si surge un problema de visados... pensar que hay toda una cadena de circunstancias que no pueden fallar, en algún momento hasta te llegas a sentir solo peleando en esto, aunque también es cierto hay mucha gente que me quiere y me brinda su apoyo. Valoro muchísimo que hayan estado ahí... y te puedo asegurar que lo he pasado mal hasta que por fin los vi aterrizar.
P: Supongo que eres consciente de que has hecho historia en el muay thai con la organización de este evento. ¿Qué te gustaría cambiar o mejorar para que el deporte crezca?
R: Es muy complicado porque no existe una verdadera unión, así que pelear por algo tan romántico como un muay thai unido, que es algo que todos queremos, es un desgaste que no me puedo permitir. Yo propongo un camino, una forma de trabajar, os brindo una propuesta, y al que se quiera quedar le pido que empuje con toda su fuerza hacia adelante porque es lo que falta, crecer como comunidad, llegar a más personas, tener mayor visibilidad. Si no hacemos las cosas así, las grandes empresas, los inversores, el capital para grandes cosas nunca llegará: ya puedes traer a los dioses del muay thai porque, mientras el área de marketing de una gran empresa te vean como evento casero de gym, no importará la historia, ni la trascendencia, ni la pasión que le pongas; siempre serás algo que no vale la pena ni revisar, así que necesitamos crecer como comunidad.
P: Si Samart y Dieselnoi fueron los mejores de la historia y, una vez que has conseguido traerlos juntos, ¿tienes miedo de haber tocado techo con este evento?
R: Es una sensación muy extraña. Te podría decir que si fuera mi ultimo evento me iría feliz, porque además tuve la oportunidad de honrar a mi maestro Arjan Pratín Sukchamroen en un marco inmejorable, pero por mi cabeza no pasa que un evento compita contra otro. Por ejemplo, la llegada de Saenchai también fue una locura, pero algo distinto a esto, ni mejor ni peor, sólo distinto. Cada evento nos deja sensaciones muy particulares pero sobre todo aprendizaje, mucho aprendizaje, mucha autocrítica e ideas a poner en práctica en el siguiente. Ahora mismo ya barajo nombres para el 2023, que de momento no puedo adelantar. Espero hacer un evento en España y otro fuera, quizás en Portugal.
P: La Embajada de Tailandia también estuvo presente en el evento. Háblanos de tu relación con ellos.
R: Si, ellos se hicieron presentes y además en el discurso de la señora embajadora destacó cómo un deporte como el muay thai puede unir tanto a dos países tan culturalmente distintos como son Tailandia y España. Ahí estamos de acuerdo porque quien descubre el muay thai termina amando Tailandia en su totalidad: su gastronomía, su geografía, su música, su historia... nos interesa todo, vivimos soñando con ir o regresar, pero te soy sincero, esta relación entre Bang Rajan Events y ellos no ha hecho más que empezar. Me siento muy honrado con su presencia, pero creo que debemos marcarnos una agenda para trabajar juntos de forma más potente. Podemos hacer grandes cosas si ellos quieren.
P: Hay mucha gente a la que hay que agradecerle su dedicación para que este evento saliera adelante, ¿verdad?
R: Así es. Gracias en primer lugar a todos los asistentes al evento por el gran esfuerzo que hacen en venir desde toda España, e incluso hubo un grupo que vino desde Portugal. Quiero dar también las gracias a mi familia, que está lejos pero los he sentido en el corazón en todo momento. A la Royal Thai Embassy por hacerse presente con una delegación encabezada por la excelentísima Embajadora Sra. Phantipha Iamsudha Ekarohit, que nos ha honrado con su presencia. A Patricia Boto Sampedro, de la DITP... ¡gracias por tanto, amiga! A la WBC por confiar en nosotros para semejante honor histórico. A Carlos Fernández, de Leone, un grande mundial que confía en nosotros; a Mario Vega, que nos regala lo mejor que tiene dentro cada vez que viene, él ama tanto esto como nosotros; a mi Maestro Arjan Pratín por venir y con 91 años dar todo lo que podía para el desarrollo de la clase; a mi equipo de Bang Rajan Events, con Carlos, Héctor, Álvaro, David... y gracias especialmente a una persona a la que un día intenté impresionar con mi trabajo y le terminé mostrando mi parte más frágil, estresante e insegura, pero lejos de salir corriendo se quedó a pelear conmigo y me hizo más fuerte. Hablo de Lauréne Fernandez, que es mi corazón, mis pulmones y mi mano derecha en esto.