Sergio Scariolo tiene decidido volver al día a día en los banquillos durante el próximo año. Estar en un equipo le permite compaginar su cargo como seleccionador español siempre que firme por un club extranjero.
Al bueno de Scariolo, que le pica demasiado el gusanillo, se lo rifan en Italia. Aunque Sergio, según desvela La Gazzetta dello Sport, tiene una obsesión: encontrar una plaza como asistente en alguna franquicia NBA. Un sueño que persigue desde hace tiempo el técnico italiano y que la próxima temporada, al fin, puede hacerse realidad.