Doc Rivers ganó este sábado su primer partido con los Milwaukee Bucks, con un 117-129 frente a los Dallas Mavericks, gracias a los 48 puntos anotados por Giannis Antetokounmpo.
Rivers había perdido sus dos partidos anteriores en el banquillo de los Bucks (33-16), que llegaban a Dallas necesitados de una victoria ante estos Mavericks (26-23) cargados de importantes bajas como las de Kyle Irving y Dereck Lively II.
Los jugadores de Jason Kidd llegaron a tener una ventaja de +25 a principio del segundo cuarto, pero los Bucks le dieron la vuelta y se pusieron a +15 a poco de terminar el partido. El parcial entre estas dos máximas diferencias fue un devastador 65 a 105.
En ese hundimiento los Mavericks acusaron las constantes pérdidas de balón, 21 frente a las 11 de los Bucks, así como la falta de acierto que les había sobrado en el primer cuarto.
Antetokounmpo lideró a los visitantes con un doble-doble de 48 puntos, 10 asistencias, 6 rebotes y 5 robos. Le acompañó con 30 puntos y 8 asistencias Damian Lillard, que venía de perder el miércoles ante su exequipo, los Portland Trail Blazers.
Para los Mavericks el mejor fue Luka Doncic, que se quedó a las puertas de un triple-doble con 40 puntos, 9 rebotes y 11 asistencias.
Con su victoria en Dallas, los Bucks siguen en la segunda posición de la Conferencia Este, mientras que los Mavericks son octavos del Oeste, en puestos de 'play-in'.
Doncic machaca a los Bucks
Declaración de intenciones de los Dallas Mavericks, que anotaron 7 de sus primeros 8 intentos de triple (87,5 %) en los 4 minutos y 50 segundos iniciales del partido, forzando a Doc Rivers a pedir tiempo muerto con un 25-16 en el marcador.
Luka Doncic se torció el tobillo derecho segundos después de la reanudación en una disputa en el parqué tras perder el balón y tuvo que retirarse a los vestuarios, pero el esloveno regresó a la pista tras perderse solo tres minutos.
Los Mavericks cerraron el cuarto con un solvente 44-20 sobre unos Milwaukee Bucks irreconocibles.
En el segundo cuarto la canasta se hizo pequeña para los triples de los Mavericks (2 de 11), que dilapidaron parte de su ventaja a base de ataques fallidos.
El final del cuarto fue desastroso para los texanos, primero con un polémico triple de Green a 22.4 segundos que rompía la barrera psicológica de los 10 puntos (65-57). Green fue asistido por Giannis Antetokounmpo, que había pegado un puntapié en el estómago a Doncic, jugada que los árbitros revisaron pero no invalidaron.
Por si fuera poco, el esloveno falló el siguiente ataque y sobre la bocina Damian Lillard metió otro triple para dejar el marcador 65-60 en el descanso.
Giannis tiene la última palabra
Los Bucks salieron a la pista dispuestos a culminar la remontada que habían dejado a punto de caramelo. Lo lograron justo a la mitad del cuarto, con un triple de Khris Middleton que los puso 75-78.
Los de Milwaukee aprovecharon el golpe y llegaron a ponerse a +8, pero fue entonces cuando los Mavericks levantaron la cabeza y empezaron a responder y enloquecieron el partido. El marcador al final del tercer cuarto era de 92-93.
El último cuarto empezó tal y como había terminado el tercero: igualado, con intercambio de golpes y espectáculo, pero los Bucks poco a poco fueron ampliando su ventaja. Jason Kidd pidió tiempo muerto a 6:38 con un 101-109.
Pero los Bucks ya habían logrado engrasar su máquina y no dieron opciones a los Mavericks para volverse a acercar en el marcador. Al final Giannis y Lillard fueron demasiado para Doncic. 117 a 129 al pitido final.