
Con el trofeo del Abierto de Estados Unidos en sus manos y reinstalado en el número uno del mundo dos años después, Carlos Alcaraz dijo en una entrevista con EFE que su objetivo inmediato es completar el 'Grand Slam'. "Tengo Australia en el punto de mira", aseguró el tenista español.
Alcaraz atendió a EFE pocas horas después de conquistar Nueva York con un triunfo ante su gran rival, el italiano Jannik Sinner. Aún en el estadio Arthur Ashe en Queens, el murciano cumplía con sus últimos compromisos con la ATP antes de reunirse con su equipo y amigos para celebrar el título.
Rumbo a la pista del estadio para una sesión de fotos con el trofeo en las manos, Alcaraz repasó el momento clave de la final: su reacción con un parcial de 5-0 tras ceder el segundo set ante Sinner, el único que perdió en todo el torneo. El resultado final fue de 6-2, 3-6, 6-1 y 6-4 en 2 horas y 42 minutos.
Alcaraz considera que aprovechar los momentos fue clave en un duelo de tanto talento:
"En el segundo set también he tenido bolas de ‘break’ en el primer juego, no las he aprovechado. Cuando no aprovechas las oportunidades contra alguien como Jannik, te pasa factura", dijo Alcaraz.
"Lo bueno del tercer set es que sí que he aprovechado las oportunidades en el primer juego de resto que he tenido. A partir de ahí me ha dado mucha confianza. Él también ha entrado un poco en bajón y nosotros hemos aprovechado nuestro subidón", añadió.
Australia, asignatura pendiente
Este Abierto de Estados Unidos fue el segundo de Alcaraz en Nueva York y su sexto 'grande' -también cuenta con dos títulos de Roland Garros y dos de Wimbledon en sus vitrinas-. Solo el serbio Novak Djokovic (24), una leyenda del tenis en el tramo final de su carrera, supera su cifra de 'grandes' entre los tenistas en activo. Además, este lunes regresó al número uno del mundo, dos años después de haberlo perdido.
Alcaraz se marca ahora un nuevo objetivo, el Abierto de Australia, el único que se le resiste.
"Es el objetivo claro. Tengo Australia en el punto de mira", dijo Alcaraz a EFE mientras recorría el muro de honor del estadio, con los retratos de todos los campeones. El murciano se detuvo prácticamente sin darse cuenta junto al de Arantxa Sánchez Vicario, campeona en 1994.
"Me gustaría, me encantaría completar el 'Grand Slam'. Los cuatro. Es el objetivo principal de cara a cada año. Es por lo que entrenamos y hacemos una muy buena pretemporada para estar lo mejor posible de cara a Australia", añadió.
'Sincaraz', duelo generacional
Como en Nueva York, en Melbourne Alcaraz deberá arrebatarle el trofeo a Sinner, dominador de la pista rápida y con quien mantiene un frenético duelo generacional. El español se impuso al de los Alpes en cuatro finales este año —Roland Garros, Estados Unidos, Roma y Cincinnati—, cayendo únicamente en Wimbledon.
Una rivalidad que cada vez parece más descompensada, aunque Alcaraz, que tiene a Sinner estudiado al detalle, no lo percibe así.
"Jannik también me ha ganado muchos partidos. Mi buena racha está sucediendo ahora. A lo mejor llegará un momento en el que él tenga la buena racha. Yo creo que los partidos que jugamos, los momentos en los que jugamos y la manera en la que nos hacemos mejores, es una rivalidad bastante buena", aseguró.
Alcaraz no viajará a Marbella para la eliminatoria de la Copa Davis de este fin de semana. Su próxima aparición será dentro de diez días en la Copa Laver de Roger Federer, en San Francisco (Estados Unidos), donde representará al equipo europeo junto a Alexander Zverev o Holger Rune.
Antes de volver a su vestuario, se le preguntó qué tenía planeado para la noche neoyorquina. "¡Disfrutar, disfrutar!", respondió con una sonrisa.
Tatuaje como homenaje
Carlos Alcaraz pedirá a su tatuador, su paisano Joaquín Ganga, que dibuje en su cuerpo la Estatua de la Libertad y el puente de Brooklyn, símbolos de Nueva York, donde ganó este domingo por segunda vez el Abierto de Estados Unidos.
Con 22 años, empezó con la tinta en su piel hace tres, cuando se coronó por primera vez en Nueva York el 11 de septiembre de 2022. Un discreto 11 09 22 en la parte posterior del brazo izquierdo fue su primer tatuaje.
Por su primer triunfo en Wimbledon, continuó con una fresa y la fecha 16 07 23 en el tobillo derecho, a las que siguió la Torre Eiffel con el 09 06 24 en la pierna izquierda por el trofeo con el que entró en el palmarés de Roland Garros ese día.
Además, porta la letra ce por triplicado en el antebrazo izquierdo por el lema que le inculcó su abuelo paterno: "Cabeza, corazón y cojones".
El tenista español llegó a anunciar la fecha de estreno de su documental (23-4-25) con otro tatuaje en una acción meramente promocional y temporal.
