LD (EFE)
Según estos datos, extraídos de un estudio, hecho público por la Fundación BBVA, sobre las balanzas fiscales de las comunidades autónomas, un madrileño, por ejemplo, aportaría a la Administración pública central 206.835 pesetas más de lo que recibe de ella; en el caso de un balear ese saldo negativo sería de 144.973 pesetas y en el de un catalán, de 65.574 pesetas.
El estudio, presentado este viernes en conferencia de prensa, fue encargado por la Fundación BBVA al catedrático de la Universidad de Valencia, Ezequiel Uriel, y abarca el período 1991-1996, aunque según su autor "es extrapolable hasta el año 2002", fecha en que varía el sistema de financiación autonómica.
Preguntado sobre si los resultados pueden utilizarse como "caballo de batalla político", Uriel señaló que "estos datos no pueden utilizarse para ver problemas de financiación autonómica, ya que se trata, exclusivamente, de un retrato de la solidaridad interregional".
El estudio, presentado este viernes en conferencia de prensa, fue encargado por la Fundación BBVA al catedrático de la Universidad de Valencia, Ezequiel Uriel, y abarca el período 1991-1996, aunque según su autor "es extrapolable hasta el año 2002", fecha en que varía el sistema de financiación autonómica.
Preguntado sobre si los resultados pueden utilizarse como "caballo de batalla político", Uriel señaló que "estos datos no pueden utilizarse para ver problemas de financiación autonómica, ya que se trata, exclusivamente, de un retrato de la solidaridad interregional".
