L D (EFE)
El tribunal que finalmente juzgó esta causa, compuesto por los magistrados Angela Murillo, José Ricardo de Prada y Elizabeth Cardona- ha condenado a penas de entre 8 y 34 años de prisión y multas millonarias a 34 de los 36 procesados por la llamada "Operación Temple". Quedan en libertad José Javier Jaramillo y Javier Ortigueira, aunque este úlitmo está en prisión cumpliendo otra condena. La sentencia fue notificada este jueves por la mañana en lectura pública. La máxima pena ha correspondido al
arrepentido
Alfonso León, para el que el fiscal solicitaba 60 años de cárcel, pero a instancias de la misma fiscalía se pidió al tribunal una rebaja en la pena a pesar de ser considerado como el líder en España de una organización de narcotraficantes colombianos dedicada al transporte de grandes cantidades de cocaína para su distribución en Europa.
El pasado 14 de enero, y a pesar de la fuga el 28 de diciembre del principal acusado, Carlos Ruiz Santamaría, alias "El Negro", los magistrados que acordaron su excarcelación -Carlos Cezón, Juan José López Ortega y Carlos Ollero, titulares de la sección cuarta de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional- comenzaron a juzgar a los 37 procesados restantes. Sin embargo, los magistrados de la sección cuarta sólo pudieron celebrar dos sesiones, ya que, tras varios aplazamientos por diversas causas, el pasado 21 de enero decidieron abstenerse de juzgar esta causa después de que la Fiscalía Antidroga les recusara por haber puesto en libertad a Ruiz Santamaría.
Posteriormente, el Consejo General del Poder Judicial acordó suspender a estos tres jueces temporalmente en sus funciones al haber admitido a trámite el Tribunal Supremo una querella contra ellos por un presunto delito de prevaricación en la puesta en libertad de "El Negro". Querella que fue sorprendentemente archivada el pasado 23 julio pese a que el fiscal veía claros indicios de prevaricación.
Más escándalo, otra fuga
Así, el juicio se inició el pasado 4 de marzo con 37 de los 38 acusados en el banquillo, y quedó visto para sentencia el pasado 28 de junio con sólo 35, después de que uno fuera apartado del proceso por motivos de salud y de que otro, José Manuel Rodríguez Sanisidro , alias "El Rubio", que estaba en libertad provisional, se diera también a la fuga. En su escrito de conclusiones provisionales, la Fiscalía Antidroga pedía para Ruiz Santamaría 60 años de prisión y una multa de 414 millones de euros al considerarle delegado en España de una organización de narcotraficantes colombianos dedicada al transporte de grandes cantidades de cocaína para su distribución en Europa.
Diez toneladas de droga y una fianza que invitaba a fugarse
La Fiscalía acusaba a “El Negro” de haber introducido en España tres alijos de droga que suman 11.000 kilos de cocaína y más de 200 de heroína, uno de los cuales fue intervenido en julio de 1999 a bordo del buque "Tamsaare", fecha desde la cual "El Negro" se encontraba en prisión. Pero, por todo ello, al Negro se le puso en libertad condicional bajo la ridícula fianza de cinco millones de pesetas. Otras 37 personas de diferentes nacionalidades estaban también acusadas de conformar este grupo de narcotraficantes que, durante los dos años en los que operó antes de su desarticulación, se calcula que introdujo y distribuyó, dentro y fuera de España, 52.000 kilos de cocaína, a razón de unos mil kilos cada quince días.
El pasado 14 de enero, y a pesar de la fuga el 28 de diciembre del principal acusado, Carlos Ruiz Santamaría, alias "El Negro", los magistrados que acordaron su excarcelación -Carlos Cezón, Juan José López Ortega y Carlos Ollero, titulares de la sección cuarta de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional- comenzaron a juzgar a los 37 procesados restantes. Sin embargo, los magistrados de la sección cuarta sólo pudieron celebrar dos sesiones, ya que, tras varios aplazamientos por diversas causas, el pasado 21 de enero decidieron abstenerse de juzgar esta causa después de que la Fiscalía Antidroga les recusara por haber puesto en libertad a Ruiz Santamaría.
Posteriormente, el Consejo General del Poder Judicial acordó suspender a estos tres jueces temporalmente en sus funciones al haber admitido a trámite el Tribunal Supremo una querella contra ellos por un presunto delito de prevaricación en la puesta en libertad de "El Negro". Querella que fue sorprendentemente archivada el pasado 23 julio pese a que el fiscal veía claros indicios de prevaricación.
Más escándalo, otra fuga
Así, el juicio se inició el pasado 4 de marzo con 37 de los 38 acusados en el banquillo, y quedó visto para sentencia el pasado 28 de junio con sólo 35, después de que uno fuera apartado del proceso por motivos de salud y de que otro, José Manuel Rodríguez Sanisidro , alias "El Rubio", que estaba en libertad provisional, se diera también a la fuga. En su escrito de conclusiones provisionales, la Fiscalía Antidroga pedía para Ruiz Santamaría 60 años de prisión y una multa de 414 millones de euros al considerarle delegado en España de una organización de narcotraficantes colombianos dedicada al transporte de grandes cantidades de cocaína para su distribución en Europa.
Diez toneladas de droga y una fianza que invitaba a fugarse
La Fiscalía acusaba a “El Negro” de haber introducido en España tres alijos de droga que suman 11.000 kilos de cocaína y más de 200 de heroína, uno de los cuales fue intervenido en julio de 1999 a bordo del buque "Tamsaare", fecha desde la cual "El Negro" se encontraba en prisión. Pero, por todo ello, al Negro se le puso en libertad condicional bajo la ridícula fianza de cinco millones de pesetas. Otras 37 personas de diferentes nacionalidades estaban también acusadas de conformar este grupo de narcotraficantes que, durante los dos años en los que operó antes de su desarticulación, se calcula que introdujo y distribuyó, dentro y fuera de España, 52.000 kilos de cocaína, a razón de unos mil kilos cada quince días.