Los partidos de la oposición en el Ayuntamiento han censurado este viernes que el PP presida la comisión de investigación del caso Madrid Arena, que ha arrancado con fuertes discrepancias y el compromiso de la alcaldesa, Ana Botella, de "hacer todo lo posible" para que no se vuelva a repetir.
El pleno extraordinario, que se ha celebrado en el Ayuntamiento de Madrid, ha aprobado, por unanimidad, la creación de la comisión de investigación que tratará de aclarar los sucesos ocurridos el pasado 1 de noviembre en el recinto multiusos, en el que murieron cuatro jóvenes y una quinta resultó herida de gravedad.
Posteriormente se ha celebrado la primera Junta de Portavoces, en la que se ha acordado que el PP tenga la presidencia de la comisión -que la oposición solicitaba para uno de sus concejales por una cuestión de "transparencia"-, y siete de sus doce miembros, por tres del PSOE, uno de IU y otro de UPyD.
También se ha decidido dar de plazo a los grupos municipales hasta el próximo día 20 a las 12 horas para presentar sus peticiones de información y de comparecencias, aunque la comisión estará abierta a nuevas solicitudes de uno y otro tipo más adelante. Según han informado el portavoz socialista y fuentes del gobierno municipal, a las 14 horas del mismo día 20 se reunirá de nuevo la Junta de Portavoces para establecer el calendario de comparecencias inicial y lo previsto es que la primera sesión se pueda celebrar la semana que viene.
Los socialistas tienen la intención de solicitar "muchas" comparecencias, de técnicos al principio y de responsables políticos más adelante, y su portavoz ha anunciado que "posiblemente haya alguna sorpresa". La Junta de Portavoces de la comisión de investigación no ha fijado una periodicidad de las sesiones ni una fecha límite para los trabajos y ha acordado que los titulares de cada grupo puedan ser sustituidos por suplentes.
Cobo: se ha actuado con la "máxima corrección"
El Pleno del Ayuntamiento de Madrid ha aprobado la creación de la comisión en una sesión a la que no ha acudido el exdelegado de Economía y Empleo Pedro Calvo, imputado en el caso, pero sí el exvicealcalde Manuel Cobo, como secretario de Política Local del PP. En declaraciones a la prensa, Cobo ha expresado el apoyo de su partido a la alcaldesa, Ana Botella, y al Gobierno municipal de la capital, que han actuando, ha dicho, "con la máxima corrección".
La alcaldesa, que ha cerrado el Pleno, ha reiterado su "compromiso para hacer todo lo posible para que una tragedia de estas características no se vuelva a repetir en Madrid". "Ese es mi único objetivo", ha garantizado Botella, que ha señalado que la comisión será "rigurosa, documentada y ágil" y que debe servir para "esclarecer la actuación del ayuntamiento dentro de sus competencias y responsabilidades".
El portavoz socialista ha defendido la comisión para "depurar las responsabilidades políticas que pudiera haber, entrar en el fondo de lo ocurrido y evitar que se pueda repetir" un hecho como el del día 1, y ha advertido de que el ayuntamiento pueda haber incurrido en una responsabilidad "civil" como propietario del pabellón.
Por su parte, el portavoz de UPyD, David Ortega, se ha preguntado si "estamos ante una desgracia o ante una negligencia" y si ésta "era evitable", a lo que ha contestado que sí porque existe un informe del ayuntamiento del 10 de marzo de 2010 que destapa "18 deficiencias concretas" que convertían el Madrid Arena en un espacio "inseguro".
El portavoz de IU, Ángel Pérez, ha dicho que su grupo estará en la comisión mientras pueda "constatar que el grupo popular facilita la transparencia en esa comisión, responda a las preguntas, facilite toda la documentación, y si es posible llegar a un dictamen que se oriente a una normativa y a una organización que impida que esto vuelva a suceder".
En su primera intervención como delegado de Economía en sustitución del dimitido Pedro Calvo, imputado en el caso, Enrique Núñez ha opinado que mientras el PP quiere "llegar a la verdad de la cosa" y "esclarecer los pormenores que rodearon este desgraciado accidente", la oposición, en concreto el PSOE, pretende "que sea una comisión partidista, de enfrentamiento político".