La digestión del proceso separatista, los malos resultados de las elecciones europeas de hace cinco semanas, el "ambiente" creado por la abdicación del Rey y la insistencia de las encuestas en predecir una drástica reducción del peso de CiU frente a ERC son algunas de las causas que han llevado al líder de Unió y portavoz de CiU en Madrid, Josep Antoni Duran Lleida, a plantear profundos cambios, tanto en el organigrama como en el ideario del partido.
Desde que anunció que meditaba su continuidad en la vida política Duran ha multiplicado su actividad. Esta vez, las propuestas del dirigente nacionalista no proceden de sus cartas a la militancia en el blog personal ni son fruto de una filtración, sino el resultado del discurso de clausura de la escuela de verano de los socios de Artur Mas celebrada este fin de semana en la población gerundense de Caldas de Malavella, conocida por la calidad de sus aguas termales y con gas.
Duran cree que se ha acabado una época y que hay que proponer nuevas teorías y abrir el partido a sectores diferentes de los tradicionales. Así, dijo que se debe combinar la doctrina social de la iglesia y la economía social de mercado con la "economía del bien común", la alternativa que el austriaco Christian Felber propone tanto a la economía de mercado como a la planificada. Como las jornadas de la escuela de verano democristiana tenían como eje la situación y retos de la familia, como concepto, Duran vinculó una mayor protección y dedicación a la familia con las teorías felberianas de las empresas proyectadas hacia valores como la "compasión, la responsabilidad social y la transparencia". Y en esa línea, invitó a "los cristianos y personas de cultura cristiana que hayan militado en el mundo socialista y de otros partidos" a entrar a Unió. Duran también tendió la mano a "los jóvenes con inquietudes que trabajan en las parroquias, empresarios comprometidos con el país, profesionales, técnicos y profesores universitarios". Sobre los últimos, alertó de su inexistencia en el seno de Unió. "Sé que hay muchos profesores detrás de Podemos. Y nosotros no tenemos ninguno", se lamentó.
Según Duran, el nuevo partido, que calificó de "movimiento", debe adoptar un discurso de "centralidad" que "dé respuestas a la crisis actual, la supere y vuelva a suscitar la confianza de los ciudadanos que hoy están hartos, o en el mejor de los casos, desencantados de la política". La propuesta de Duran se produce cuatro días después de que el presidente del Banco de Sabadell reivindicara la creación de "una especie de Podemos de derechas" en el marco de un acto en el que la presidenta del Círculo de Empresarios, Mónica de Oriol, acusara a la CEOE de funcionar como "casta".