El exdirector de El Mundo, Pedro J. Ramírez, ha protagonizado este martes una larga comparecencia en la comisión de investigación del Congreso de los Diputados sobre la presunta financiación irregular del PP.
Pedro J. ha contestado a preguntas de los grupos políticos sobre el contexto en que se fraguó su artículo "Cuatro horas con Bárcenas", publicado en el verano de 2013, y que a su juicio precipitó su cese a principios de 2014 tras un "boicot" institucional del Gobierno de Mariano Rajoy, a quien no ha dudado en señalar como la X del caso, que él mismo ha descrito como "una máquina de delinquir".
El veterano periodista ha asegurado que ni Felipe González ni José Luis Rodríguez Zapatero actuaron en su contra como lo hizo el Ejecutivo del PP, con maniobras como el plantón a los Premios Internacionales de El Mundo, o la presión para que la inversión en publicidad en ese medio se redujera considerablemente con respecto a sus competidores, en particular el diario La Razón, al que "siempre le iba muy bien".
El "intocable" Casals
Ramírez ha señalado el papel de la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, en esas maniobras, si bien la ha desvinculado de la financiación irregular del PP, como también ha hecho con el expresidente del Gobierno, José María Aznar.
Igualmente se ha referido como responsable de esas maniobras al presidente de La Razón, Mauricio Casals: "Quiero llamarles la atención sobre el hecho de que, en el caso de uno de los dos grupos concesionarios y a los que se ha permitido acumular dos de las más importantes licencias de cadenas de televisión, el factótum editorial de ese grupo es uno de los intermediarios del caso Bárcenas, me estoy refiriendo al señor Mauricio Casals. Evidentemente, uno de los intocables que hay en este país".
Tenso rifirrafe con el PP
La comparecencia se ha cerrado después de tres horas con un tenso interrogatorio por parte del diputado del PP, Eloy Suárez, que ha acusado al periodista de tener "animadversión" a Rajoy.
Ramírez ha recogido el guante relatando cómo a mediados de los años noventa fue el hoy jefe del Ejecutivo quien, por encargo de Aznar, le enseñó "casi todo lo que sucedía, por lo que nos hemos enterado luego" en la sede del PP en la calle Génova de Madrid, cómo cenaba con él en su domicilio, o en el de otros dirigentes populares como Luis de Guindos o Ángel Acebes o cómo, durante su etapa de líder de la oposición, le llamaba "frecuentemente" para consultarle "asuntos de actualidad" entre ellos "el 11-M".
Justo en el final de su comparecencia, Pedro J. Ramírez ha recordado que había pedido "hasta en siete ocasiones" el voto para el PP y se ha dirigido a los diputados de este partido para preguntarles dónde estaban las falacias y manipulaciones de las que le acusó Rajoy durante una comparecencia en el Congreso en el verano de 2013.
Además, ha acusado al líder de los populares de haberle perseguido como no lo hicieron sus tres antecesores en La Moncloa: "Ni cuando yo decía cosas mucho más terribles, en relación a hechos más terribles, sobre el señor Felipe González o sobre la negociación con ETA del señor Zapatero o sobre la intervención en la Guerra de Irak del señor Aznar, jamás un jefe del Gobierno, en sede parlamentaria y sin conceder la posibilidad de responder, me acusó de mentir, calumniar, tergiversar y manipular".