Un contratista ha desmontado en sede judicial la coartada del tesorero de Podemos, Daniel de Frutos, para tapar las irregularidades en las obras de la sede del partido. De Frutos declaró el pasado viernes como investigado ante el titular del Juzgado Instrucción nº 42 de Madrid, Juan José Escalonilla. El contratista también compareció ante el juez, pero como testigo sólo una hora después.
Podemos destinó 1.361.055 euros a remodelar su sede central de la calle Villaespesa nº 18 en Madrid, aunque sólo había licitado un gasto 649.936,68 euros. La fecha de formalización del contrato por procedimiento de urgencia fue el 4 de junio de 2019. Sin embargo, el exletrado de Podemos, José Manuel Calvente, denunció que las obras arrancaron de forma irregular el 20 de mayo, es decir, dos semanas antes de que se formalizara el contrato.
Fuentes presentes en la declaración del tesorero del partido, Daniel de Frutos, consultadas por Libertad Digital aseguran que el instructor de la causa le preguntó por el inicio de las obras antes de tiempo. De Frutos contestó que el edificio adquirido pertenecía a la empresa Transhotel con más de 350 empleados y que se produjo "un derrumbe" y por tanto, se tuvieron que hacer "trabajos para limpiar y retirar todo el mobiliario". Es decir, justificó el inicio de obras en la sede antes de las formalización del contrato por un supuesto derrumbe.
Como desveló LD, el partido recibió los presupuestos de los contratistas para remodelar su sede 2 días antes de iniciar la licitación. Además Irene Montero y Pablo Echenique asistieron al Consejo de Coordinación del partido que aprobó el proyecto por la mitad de lo que resultó el presupuesto final sin realizar ninguna objeción.
Para intentar justificar que el precio de adjudicación (1,3 millones) fue el doble que el de licitación (649.936), De Frutos afirmaba en su declaración que cuando se abrió el citado proyecto de licitación no se habían incluido otros conceptos como "el beneficio industrial, el IVA y otros costes generales" que contribuyeron a que el precio se acercara más al que fue su coste final.
Las mismas fuentes consultadas por este diario señalan que la sorpresa se apoderó de la sala de declaraciones cuando llegó el turno de la comparecencia del contratista que inició las obras antes de la licitación. Durante su declaración como testigo, el contratista aseguraba que visitó el edificio "a últimos de mayo" y que "no había derrumbe", tal y como había firmado el tesorero de la formación morada ante el juez apenas una hora antes.
La gerente de Podemos, Rocío Val, que compareció también como investigada apuntó al juez también que era "falso" que la remodelación de la sede comenzara el 20 de mayo y que "las obras no empezaron antes de la licitación en ningún caso". Por su parte, la responsable de Compras y Servicios, Andrea Deodato, también imputada afirmó en la misma línea que "no era cierto que empezaran las obras antes".
Del Olmo reconoce que él decidió contratar a Neurona
Tal y como avanzó este diario, el nº 2 de Pablo Iglesias en la Vicepresidencia del Gobierno, Juanma del Olmo, reconoció al juez que él decidió contratar a la consultora chavista Neurona en nombre de Podemos. Del Olmo afirmó que él era quien elegía a los proveedores y por tanto, a Neurona. No obstante, apuntaba que "desconocía" que Neurona tuviera una filial en España, denominada Neurona Comunidad S.L., a la que el partido transfirió los pagos que investiga el juez, y que dicha sociedad no tuviera trabajadores.
Según Del Olmo, "habló directamente" con el propietario de Neurona, César Hernández Paredes, que también ejercía como comercial y fue el propio Hernández Paredes el que se puso en contacto con él y "le ofreció sus servicios". Por su parte, el tesorero de Podemos, Daniel de Frutos, fue el encargado de la contratación.