Ya son cinco los detenidos en relación con la muerte de una embarazada -de 28 años- que recibió el pasado lunes un disparo en la cabeza en plena calle, en la localidad castellonense de la Vall d'Uixó. La joven, de nacionalidad lituana, falleció el martes en el Hospital Clínico de Valencia, donde lograron salvar la vida de su bebé tras practicarle una cesárea de urgencia.
El primero en ser arrestado -este jueves- fue el novio de la mujer, aunque los investigadores descartan que se trate de un caso de violencia doméstica. Los hechos ocurrieron en el marco de una pelea en el conflictivo barrio de Carnonaire, en la que participó "un grupo de personas".
A la pareja de la mujer se le acusa de homicidio y tenencia ilícita de armas. Él sería la persona que efectuó el disparo del proyectil que terminó impactando en la cabeza de la víctima "de forma fortuita". Parece ser que fue de forma involuntaria, durante un forcejeo con la joven precisamente para evitar que la usara contra otra persona durante la disputa.
La investigación, a cargo de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Castellón, continúa abierta para esclarecer las circunstancias del suceso. Este mismo viernes, agentes del Instituto armado han detenido a otras cuatro personas. Según han detallado fuentes cercanas al caso para Libertad Digital, "a dos por cooperación necesaria y a las otras dos por encubrimiento".
Lo que sabe del suceso
Los hechos se produjeron cerca de las 23.00 horas del pasado lunes, en el marco de una reyerta -posiblemente relacionada con el tráfico de drogas- que tuvo lugar en la calle, muy cerca del domicilio de la víctima, en el barrio Carbonaire de la localidad castellonense de Vall d'Uixó. Durante la pelea, se realizan dos disparos y una de las balas impacta en la cabeza de la joven.
La mujer, que se encontraba en avanzado estado de gestación, llega al centro de salud con una herida por arma de fuego. La acompañaba su pareja, la violencia doméstica se descartó desde el principio. A las 23.10 horas, dan el aviso y se movilizan dos ambulancias. Tras diversas maniobras, el equipo médico logra estabilizarla y la trasladan al Hospital Clínico de Valencia.
Ingresa en estado crítico. Esa madrugada, le practican una cesárea de urgencia y logran salvar la vida del bebé. Una niña que "evoluciona favorablemente" y está "muy bien" tanto a nivel biológico como cognitivo, ha confirmado el consejero de Sanidad de la Generalidad Valenciana, Miguel Mínguez.
La madre de la pequeña, por su parte, murió en el hospital el mismo martes, unas horas después de dar a luz. Y fue enterrada dos días más tarde, el jueves por la tarde, en el cementerio de la localidad valenciana de Faura. Su pareja acabó el día en el calabozo, donde puede permanecer hasta 72 horas, a la espera de que se esclarezcan las circunstancias del suceso.