
Sergio Candanedo, uno de los mayores conocedores en ideología de género en España y presentado en redes sociales como Un Tío Blanco Hetero, denunció la contradicción interna que se ha apoderado de la izquierda progresista en los últimos años. En su intervención en La Trinchera en Llamas de esRadio, Candanedo criticó duramente los movimientos impulsados por la izquierda, afirmando que, al final, terminan siendo devorados por ellos mismos.
"Lo que les está sucediendo es un reflejo de lo que ha pasado con otros movimientos como #MeToo o la cultura de la cancelación. Son ellos mismos los que, al intentar instrumentalizar ciertas banderas sociales, acaban siendo canibalizados por sus propias tendencias", explicó.
Candanedo puso como ejemplo el caso de Íñigo Errejón, quien, a pesar de haber defendido la postura de que "las denuncias falsas no existen", se encuentra ahora envuelto en una denuncia de este tipo. "Es el mismo Errejón que, en su momento, acusaba a la extrema derecha de la criminalización hacia las mujeres, y "ahora es él quien dice que está siendo víctima de una denuncia falsa. Me pregunto si lo explicará", apuntó Candanedo. Además, recordó cómo Errejón, un firme defensor de la causa feminista, se mostró crítico con el caso Rubiales y Jenni Hermoso, pero, según Candanedo, luego sabemos que en la intimidad su comportamiento era muy diferente, "como un ave depredadora".
Sobre la polémica Ley Solo sí es sí, Candanedo manifestó que, aunque algunos juristas defienden que la ley ha generado más indefensión jurídica, el principal problema sigue siendo la falta de pruebas para demostrar la ausencia de consentimiento. "El consentimiento siempre ha sido el eje de la agresión sexual en el derecho penal, mucho antes de la intervención de Irene Montero", señaló.
Asimismo, Candanedo argumentó que esta legislación parece haber sido más un "episodio de marketing político" que una verdadera reforma judicial. "Han logrado liberar a cientos de agresores sexuales y rebajar condenas a miles. Esto es un paso atrás que va en contra de lo que decían defender", concluyó, asegurando que, aunque su intención parecía ser cambiar la justicia, el resultado ha sido un retroceso en la protección de las víctimas.

