Israel ha pasado de las advertencias a los hechos en Siria. Un ataque con drones de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) ha impactado este miércoles contra la sede del Estado Mayor del Ejército sirio en Damasco. Tras la operación, el ministro de Defensa israelí, Israel Katz, ha lanzado un contundente aviso a las nuevas autoridades sirias: "Las señales en Damasco han terminado y ahora vendrán los golpes dolorosos".
El ejército israelí vuela el ministerio de Defensa sirio en Damasco. pic.twitter.com/Om3UUUwL6c
— Alejo Schapire⚡️ (@aschapire) July 16, 2025
La ofensiva israelí responde a los enfrentamientos en la ciudad de Sueida, donde las fuerzas del nuevo régimen sirio, surgido tras la caída de Bashar al Assad y encabezado por el antiguo líder yihadista Ahmed al Shara, combaten contra milicianos drusos. El Gobierno de Israel, con el primer ministro Benjamin Netanyahu a la cabeza, se ha comprometido a proteger a la minoría drusa. "Pueden contar con las FDI para proteger a sus hermanos en Siria", ha sentenciado Katz.
El ataque en la capital siria no es una acción aislada. El Ejército hebreo ha informado de que ha reforzado su despliegue en la frontera con varias compañías y que durante las últimas 24 horas ha atacado carros de combate, lanzaderas de cohetes y rutas de acceso en los alrededores de Sueida. Además, las FDI han frustrado un intento de penetración en su territorio por parte de "decenas de sospechosos" procedentes de Siria.
La caída del régimen de Al Assad, a manos de una ofensiva encabezada por el grupo terrorista Hayat Tahrir al Sham (HTS), ha sumido al país en una profunda inestabilidad y en conflictos sectarios. Los combates en la región de Sueida han dejado ya un balance de más de 250 muertos, de los cuales más de un centenar son civiles drusos, según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.