El Consejo de Administración de RTVE ha cesado este martes a su presidenta interina, Elena Sánchez, en una tensa reunión que si algo ha evidenciado es la guerra abierta en el ente público desde hace tiempo. La reunión comenzaba con la salomónica decisión de Sánchez de destituir al director de Contenidos, José Pablo López, en lo que parecía ser un intento a la desesperada de salvar su puesto, algo que finalmente no ha sucedido.
Esta destitución se aprobaba gracias a los votos a favor de la propia presidenta, junto a los consejeros del PP (Jenaro Castro, Carmen Sastre y Consuelo Aparicio) y uno de los dos de Unidas Podemos (José Manuel Martín Medem). Lo que nadie imaginaba es lo que vendría después: la propia Sánchez tendrá que abandonar su puesto y, según apuntan a Libertad Digital fuentes de RTVE, la presidencia pasará a ser rotatoria.
El contrato de Broncano
La guerra abierta en el ente público llevaba librándose varios meses. Sin embargo, quedó en evidencia el pasado 11 de marzo con la paralización del fichaje de David Broncano y su programa La Resistencia, asunto que tenía que retomarse este mismo martes. Aquel día, la todavía presidenta, que fue la encargada de presentar la propuesta del fichaje ante los consejeros, decidió abstenerse, mostrando así sus diferencias con José Pablo López, quien compartía con Moncloa la necesidad de apostar por el famoso presentador con el ánimo de competir con El Hormiguero para mitigar la crítica al Gobierno que encarna Pablo Motos.
El desacuerdo radicaba fundamentalmente en la exigencia de Broncano y las productoras de El Terrat y Encofrados Encofrasa de firmar un contrato cerrado de tres años, con un coste de 42 millones de euros. La abstención de Elena Sánchez fue tachada de "traición" por la mayoría del Comité de Dirección que, al día siguiente, con la única excepción de la directora de Gabinete de Presidencia, Verónica Ollé, decidió plantar a la todavía presidenta en la reunión que ésta había convocado para explicar el porqué de su voto.
Según ha podido saber LD, Sánchez defendía un acuerdo por un año ligado a la audiencia, con posibilidad de renovación, algo habitual en estos casos. Sin embargo, el enfrentamiento iba más allá. Fuentes sindicales insisten en que ésta solo es la gota que ha colmado el vaso después de una larga batalla con la propia Elena Sánchez y José Pablo López como máximos representantes de dos posturas totalmente contrapuestas sobre qué contenidos debe tener el ente público, aunque aclaran: "La batalla no es ideológica, sino económica. En lo que no se ponen de acuerdo es a quién dar la pasta".
¿Más dinero para Prisa?
Además de zanjar el asunto Broncano, también estaba previsto que en el consejo de este martes se votase la compra por parte de RTVE de That's my jam, programa presentado por Arturo Valls y producido por LACOproductora, la compañía fundada por José Miguel Contreras e integrada dentro del Grupo Prisa, que se ha convertido en una de las más beneficiadas por los contratos del ente público.
En este caso, estaríamos hablando de unos 4,5 millones de euros. Sin embargo, desde su fundación en febrero de 2018, la productora en cuestión habría conseguido más de una veintena de contratos por valor de más de 30 millones de euros. Entre ellos, el polémico Las cosas claras, de Jesús Cintora o el fracasado programa de Julia Otero de Días de tele.