Sánchez coloca a Rebeca Torró junto a tres adjuntos en la secretaría de Organización y a Montse Minguez de portavoz

Pedro Sánchez ha vuelto a dar la sorpresa y ha reventado todas las quinielas. Al final ha optado por una mujer desconocida, Rebeca Torró, para que sea la próxima secretaria de organización del PSOE. Se trata de una política relativamente joven, con 44 años, y que ha sido consejera de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad con Ximo Puig. Más tarde, fue portavoz del PSPV en las Cortes Valencianas y desde 2023 es secretaria de Estado de Industria

Este sábado ascenderá a nivel orgánico y se convertirá en la tercera mujer en ocupar la Secretaría de Organización del PSOE. Un puesto que sólo han ocupado dos féminas (Carmen Bloise y Leire Pajín)

Lo sorprendente es que Torró tendrá hasta tres adjuntos a la secretaria de organización para sustituir a Juanfran Serrano. Se trata de Anabel Mateos, esposa de Antonio Hernando, quien antes de entrar en la Ejecutiva del PSOE estuvo en la consultora Accento de Pepe Blanco. Su relación de pareja con Hernando es determinante en su ascenso político, ya que entró en la Ejecutiva durante el último Congreso del PSOE celebrado en Sevilla. Hernando fue otro de los llamado Pepiños Boys, junto a Pedro Sánchez y Oscar López. Los principales fontaneros durante la etapa de Zapatero.

De ahí, la amistad que le unió con Hernando, llegando a ser su portavoz parlamentario y una de las personas con más poder orgánico, al tener varias secretarías en la Ejecutiva. Más tarde se distanciaron ya que llegó a ser el portavoz que defendió la abstención en la investidura de Rajoy. Tras una carta suplicando perdón, volvió a Moncloa para ser adjunto a jefe de Gabinete.

También como adjunto figura Francisco J Salazar Rodríguez, quien estaba en las quinielas para ser secretario de organización. Se trata de una persona de la máxima confianza del presidente del Gobierno y quien conoce el interior del partido. Además, el sevillano conservará su puesto de Análisis y Acción Electoral. Por último, Sánchez también mantiene en el adjunto a Borja Cabezón. Este joven político madrileño, una de las promesas del partido, mantendrá el puesto de secretario de transparencia.

Ademas, se finiquita la era de Esther Peña al frente de la portavocía y se pone a la diputada del PSC, Montserrat Mínguez García. Una mujer que fue afín a Santos y era su brazo en el grupo parlamentario. También habrá una portavocía adjunta que mantendrá la Secretaria de Política Económica, Transformación, Emprendimiento y Cambio Social, Enma López Araújo. Mínguez llegó a sonar para la Secretaría de Organización pero varias federaciones alertaron que, si al final era designada, votarían en contra ya que una militante del PSC no puede dirigir la vida orgánica de otro partido, el PSOE con estatutos y organigrama diferentes. Al final, Pedro Sánchez ha optado por evitar problemas.