Un diputado provincial de la coalición gobernante Frente de Todos, Adrián Grana, fue detenido en los enfrentamientos que se produjeron en el exterior de la casa de Cristina Fernández de Kirchner en Buenos Aires la noche de este lunes, en unas manifestaciones surgidas después de que la Fiscalía pidiera que se condene a la expresidenta y todavía vicepresidenta a 12 años de prisión en un caso por presunta corrupción.
La manifestación se inició con personas opositoras al Gobierno, que celebraron el contundente alegato final del fiscal Diego Luciani, en el que demostraba con abundantes datos y pruebas los delitos cometidos y señalaba a Cristina Fernández como cabecilla de una organización criminal.
Más tarde llegaron grupos de personas defendiendo a la vicepresidenta y unos y otros comenzaron a cruzarse insultos. Rápidamente se desplegaron fuerzas policiales para separar a ambos colectivo, momento de tensión en el que se registraron algunos forcejeos con los efectivos de seguridad.
Fue entonces cuando el diputado peronista golpeó a un agente de la policía de Buenos Aires –según ha confirmado una fuente de la Policía al diario La Nación– y fue detenido.