Hace unos días, Lula da Silva fue responsable de una infame declaración en la que comparó la guerra en Gaza con el Holocausto, lo que provocó un grave incidente diplomático entre Brasil e Israel y la reacción del ministro de exteriores, Israel Katz, quien calificó dichas palabras de "vergonzosas y graves".
Sin embargo, lo que no parece recordar el presidente brasileño, o tal vez busca desviar la atención, es lo que ocurre en su país. Según el portal G1, del grupo mediático Globo, hasta el 20 de febrero de este año se han registrado al menos 52 muertes en la zona de Baixada Santista por operaciones contra el crimen organizado y el narcotráfico encabezadas por la Policía Militar de Sao Paulo. Estos datos apuntan a que las cifras se han cuadriplicado respecto a lo registrado el mismo periodo de 2023.
Ação policial na Baixada Santista em São Paulo. pic.twitter.com/MKgzqp0fVG
— ᒪᕮⅤϒ (@LevySallahK) February 21, 2024
Las informaciones detallan que esta ofensiva en esa zona de la ciudad más poblada de Brasil comenzó a fines de 2023 como respuesta a la muerte de un agente del grupo de élite de la Policía Militar de Sao Paulo. Ante esta situación, la Defensoría Pública de Sao Paulo pidió a la ONU que interceda para detener estas operaciones.
Más allá de las trágicas cifras, resulta curioso que esto ocurra mientras Lula se atreve a criticar a Israel y el representante brasileño ante las Naciones Unidas critica la "inaceptable parálisis" del organismo que provoca la muerte de civiles inocentes en Oriente Próximo o Ucrania.