El objetivo de Marín es mejorar las condiciones de trabajo de los diputados, reducir la cantidad de papel que todavía manejan e incorporar a la Cámara Baja a la sociedad de la información. Con los nuevos equipos, se facilitará el uso de internet, del correo electrónico y de un servicio de 'chat' interno (mensajería instantánea) que les mantendrá en permanente contacto con su grupo parlamentario y con otros diputados. A estos medios de trabajo se unen otros con los que cuentan desde hace meses, como ordenadores portátiles, teléfonos de última generación y líneas de alta velocidad ADSL.
En la sesión de este martes, se han usado por primera vez los dos nuevos paneles de votación, algo más anchos que los tradicionales, que en los últimos meses habían fallado en exceso. Estos paneles podrán emplearse a su vez como monitores para proyectar vídeos y exhibir documentos de distinta clase.
El salón de plenos del Senado, que también celebra este martes su primera sesión, estrena un sistema de conexión inalámbrica a Internet para que los senadores accedan a las bases de datos y a sus iniciativas durante los debates.