(Libertad Digital) Según cuenta The Inquirer y El Informador, las diócesis de Módena, el sur de Bari y otras ciudades italianas han pedido la abstención de enviar mensajes electrónicos los viernes de Cuaresma.
"Es una forma modesta de recordar la importancia de las relaciones concretas y no virtuales [...] Es un instrumento para recordarnos que nuestras acciones y estilo de vida tienen consecuencias en países distantes", aseguró la diócesis de Módena. La de Turín sugirió abandonar la televisión. Otras sugerencias incluyen dejar el coche en casa y viajar en bicicleta o transporte público o disfrutar de una semana de silencio sin iPod.
No obstante, otros miembros del clero italiano no lo tienen tan claro. Según uno de los sacerdotes de una basílica romana, Giancarlo Angelo Andreis, "si el uso es caprichoso, entonces la abstinencia es bienvenida, pero si es necesaria la tecnología para trabajar, carece de sentido".