
El pasado fin de semana, el programa de La Sexta Xplica, presentado por José Yelamo, volvió a tratar el tema de la vivienda donde se escucharon diversos puntos de vista y donde se trataron de poner sobre la mesa algunas posibles soluciones a uno de los mayores problemas a los que se enfrenta España en el corto, medio y largo plazo. Aunque en esta ocasión no traemos a algunos de nuestros tertulianos de cabecera, como Afra Blanco o Gonzalo Bernardos, tenemos un rifirrafe que no dejará indiferente a nadie.
Como decimos, a lo largo del programa se enfrentaron diversas posturas entre ellas para ver quién tenía más o menos razón, y en uno de esos momentos se produjo un "cara a cara" entre el inversor inmobiliario Javier Medina (a quién hemos entrevistado en Libre Mercado) y Laura Bellido, que se definió como "una persona que comparte piso con tres compañeras más". Este momento ha tenido cierta repercusión en redes sociales y hasta el propio Javier Medina ha compartido este vídeo en su cuenta personal de X (Twitter):
Dos formas de entender la vida. Desde la QUEJA o desde la ACCIÓN.
Puedes responsabilizarte de tus problemas y actuar o seguir pensando que el mundo conspira contra ti.
Este es el ejemplo perfecto de por qué a algunos les va bien en la vida. pic.twitter.com/q2YJu1VEMR
— Javier Medina | Libre a los 30 (@Javier_Medina) May 19, 2025
Tal y como habrá podido observar el lector, dicho cara a cara llega a ser surrealista por momentos, sobre todo cuando Laura Bellido se queja amargamente de que "por qué se tiene que ir de su barrio", como dando a entender que alguien la quiere echar de su barrio, cuando lo que ocurre realmente es que hay más gente que quiere vivir en el mismo lugar que ella y (ante la falta de oferta de vivienda) que esa demanda lo que hace es impulsar los precios hacia arriba.
Como muy bien le responde Javier Medina, la razón por la que "se tiene que ir de su barrio" es porque la ley de la oferta y la demanda es la que establece que si hay un aumento de la demanda sin que la oferta crezca al mismo ritmo que esta, el precio del bien o servicio aumenta de precio, y aquel que esté dispuesto a pagar ese precio es el que se hace con ese bien o servicio.
Pues bien, aunque esto parece algo bastante sencillo de entender y que es algo básico sobre la economía y sobre la escasez de recursos, parece que no es algo que lograse entender Laura Bellido, ya que le respondió con un "pues no lo entiendo" al inversor inmobiliario.
Para más inri, la tertuliana afirmó acto seguido que no quería que se priorizará a otro comprador antes que a ella. Aunque esto es algo perfectamente entendible, pues todos querríamos ser la máxima prioridad en todo aunque no fuésemos la mejor opción, lo que carece de todo sentido es que pretendamos obligar a alguien a que nos elija a nosotros por encima de otras personas que lo van a hacer mejor que nosotros. Si trasladamos esto al caso que nos ocupa, no se puede pretender que un propietario elija alquilarle o venderle la casa a ella si puede conseguir un alquiler o una venta mayor en el mercado.
Este fragmento pone de manifiesto dos formas de pensar y de actuar completamente distintas, por un lado tenemos la de una persona que ha sabido adaptarse al entorno que hay, entendiendo cuáles son las reglas de juego y tratando de aprovechar al máximo posible las oportunidades que se le presentan, y por otro lado tenemos la actitud de alguien que habla más desde la emoción que desde la razón, desde la queja más que desde la acción, y que no termina de tener muy claro cuál es la situación de la vivienda en España.


