
El Ayuntamiento de Madrid activará un nuevo dispositivo "de emergencia temporal" para dar respuesta a la prolongada situación de personas sin hogar que pernoctan en el aeropuerto de Barajas. Así lo ha anunciado este jueves la vicealcaldesa y portavoz municipal, Inma Sanz, tras la reunión de la Junta de Gobierno, en la que se ha autorizado un gasto de 932.000 euros para habilitar un centro de atención social que estará operativo entre la segunda quincena de julio y la segunda de octubre.
El nuevo centro, ofrecerá hasta 150 plazas de alojamiento en régimen nocturno y está dirigido a personas previamente atendidas en el aeropuerto, siempre que estén empadronadas en Madrid y cuenten con seguimiento de los servicios sociales municipales, como equipos de calle o Samur.
Funcionará por las noches de 20:00 a 09:00 horas y contará también con 20 plazas — incluidas dentro de esas 150— en régimen de 24 horas. Incluirá alojamiento, cena, desayuno, bocadillos para el mediodía, y servicios como aseo, ropero, lavandería y tarjetas de transporte "para que puedan desplazarse al centro". Pero más allá de garantizar lo básico, dicen, lo importante será la intervención social individualizada para acompañar a "los usuarios en su salida a la vida autónoma, que es el objetivo final", o en su defecto, facilitarles el acceso a otros centros especializados.
El Ayuntamiento ha explicado que el periodo de funcionamiento del recurso —hasta mediados de octubre— se debe a que el espacio será utilizado posteriormente en la campaña de frío, como ocurre de manera habitual. "Vamos a ver cuál es el grado de ocupación durante este periodo y luego se buscarán las distintas alternativas y soluciones", ha indicado la vicealcaldesa.
Durante el mes de junio, los equipos municipales atendieron a 119 personas en el aeropuerto de Barajas, que "de manera mayoritaria" rechazaron las ayudas del Consistorio. Durante el primer semestre del año, aseguran que solo 17 accedieron a programas de la red municipal para personas sin hogar. Según ha recordado Sanz, todas estas prestaciones "son voluntarias" y como tal, "deben ser aceptadas por los propios usuarios".
Aunque la situación actual en Barajas dista mucho de la que se vivía hace unos meses —cuando llegaron a pernoctar allí más de 500 personas sin hogar—, desde el equipo de Gobierno han justificado que la medida llega tras meses de trabajo silencioso en el terreno para "intentar atraerlas". "Una vez que venimos haciendo ese trabajo, lo que hacemos es ampliar la disposición de plazas que tenemos en nuestra red para que todo lo que tenga que depender del Ayuntamiento, desde luego esté garantizado", ha respondido, al entender que es "el momento" para ampliar el número de plazas.

