
L D (EFE) El primer ministro israelí, Ariel Sharon, ha sufrido un deterioro por lo que los médicos temen por su vida, según el parte oficial del hospital Hadasa de Jerusalén. Tras detectar graves daños en el parato digistivo, sufría un bloqueo de iirigación sanguínea, del mandatario israelí, los médicos han decidido intervenirle quirúrgicamente, con éxito según las últimas informaciones. Sin embargo, su estado de salud continúa siendo crítico.
Los dos hijos del primer ministro israelí, Ariel Sharon, y los funcionarios que trabajan con él han acudido ya al hospital. Omri y Gilad, que antes se turnaban para acompañar a su padre, se encuentran ahora juntos en el hospital. Asimismo, todos los funcionarios de la oficina de Sharón, además de varios ministros y legisladores, están en el centro médico.
En el último parte médico proporcionado por el hospital Hadasa de Jerusalén el 3 de febrero, Ariel Sharon permanecía "grave pero estable" después de que el 4 de enero sufriera una hemorragia cerebral masiva. Los médicos decidieron entonces someterlo a una gastrostomía (sonda insertada en el estómago) para alimentarle. Antes de que se le practicara la gastrostomía, Sharon era alimentado por medio de una sonda colocada del esófago al estómago, pero esto conllevaba el riesgo de infecciones y de que el alimento líquido llegara a los pulmones.
El primer ministro sufrió las primeras señales de la hemorragia cerebral en su granja "Los sicomoros", situada en el desierto meridional del Néguev, desde donde fue trasladado hasta el Hadassa. En el hospital fue sometido a tres intervenciones para detener hemorragias y la presión en la caja craneana, pero sin que recuperara en ningún momento la consciencia.
