Bono, como toda la pandilla de este gobierno cobarde, intenta acabar con un problema de ESTADO con la fuerza ilegal de no respetar los derechos humanos de Aminetu Haidar (recordad este nombre, seguro que algun día habrá que hacerselo tragar a los zapateros), que están claramente descritos en la Declaración de Derechos Humanos, esa a la que se aferran las izquierdas cuando les interesa, y que niegan para una mujer indefensa y en peligro de muerte.
Que cobardes son, creo que ya habrán recurrido a Obama y Sarkosy a ver si les sacan de esta mierda. Esperemos que sea así, al menos esta señora tendría alguna posibilidad de salvarse.
CRONICA DE UNA MUERTE ANUNCIADA.