(Libertad Digital) El informe, del que se hace eco el diario Jerusalem Post, revela que decenas de instalaciones militares, fábricas, aeropuertos, puertos, sistemas de comunicación y depósitos de combustible sufren graves carencias en materia de seguridad, que podrían ser utilizadas por grupos terroristas para perpetrar ataques de envergadura. Entre los lugares mencionados por los comisionados figuran el principal puerto del país (Haifa) y el aeropuerto de Tel-Aviv (Ben Gurión).
Efraín Sneh, diputado por el Partido Laborista (Avodá), declaró en Israel Radio que él y su compañero en el citado comité Omri Sharon, de Likud, comprobaron que varios trabajadores extranjeros y palestinos en situación ilegal habían instalado sus viviendas en el perímetro de “una importante instalación militar” del centro del país. “Todavía no conocemos todas las nacionalidades de las gentes que encontramos allí”, añadió Sneh.
A juicio del Comité, 153 lugares deberían quedar bajo vigilancia y responsabilidad policial. Asimismo, reclama que se establezca un procedimiento de seguridad.
Yuval Steinitz, director del Comité de Seguridad, ordenó en marzo que un equipo controlara las instalaciones militares estratégicas y civiles susceptibles de ser objeto de un ataque terroristas. Steiniz afirmó que el informe debe “sacudir” a todo aquel que tenga que ver con la seguridad estratégica de Israel, pero descartó que lo que de él se desprende pueda servir como un “menú para los terroristas”.
