L D (EFE) Los expertos italianos en lucha antiterrorista recomiendan especial atención en la vigilancia de los considerados como objetivos sensibles: aquellos relacionados con los países que han participado en la guerra de Irak, entre ellos EEUU y el Reino Unido.
Tras los atentados del 11 de septiembre de 2001, Italia puso ya en marcha un dispositivo de seguridad en el que participan 4.000 militares para la vigilancia de los lugares considerados de riesgo.
La circular coincidió este viernes con una reunión entre el ministro del Interior, Giuseppe Pisanu, y los máximo responsables de las fuerzas de seguridad a nivel nacional. El subsecretario del Interior, Antonio D'Ali, confirmó además la posibilidad de nuevas expulsiones de Italia de personas relacionadas con el extremismo islámico. Interior decidió esta semana la expulsión de siete ciudadanos magrebíes considerados "indeseables", además del imán de la mezquita de Carmagnola (norte), el senegalés Fall Manur.
El imán había advertido a través de los medios de comunicación de la posibilidad de atentados terroristas en Italia si este país no retiraba a su contingente militar en Irak y, tras un registro policial en su domicilio, le fue encontrado material relacionado con la red extremista Al Qaeda. A pesar de esta situación de alarma, el viceprimer ministro italiano, Gianfranco Fini, señaló que "todos los países son objetivos potenciales para los terroristas y en Italia no existe una amenaza específica".
Tras los atentados del 11 de septiembre de 2001, Italia puso ya en marcha un dispositivo de seguridad en el que participan 4.000 militares para la vigilancia de los lugares considerados de riesgo.
La circular coincidió este viernes con una reunión entre el ministro del Interior, Giuseppe Pisanu, y los máximo responsables de las fuerzas de seguridad a nivel nacional. El subsecretario del Interior, Antonio D'Ali, confirmó además la posibilidad de nuevas expulsiones de Italia de personas relacionadas con el extremismo islámico. Interior decidió esta semana la expulsión de siete ciudadanos magrebíes considerados "indeseables", además del imán de la mezquita de Carmagnola (norte), el senegalés Fall Manur.
El imán había advertido a través de los medios de comunicación de la posibilidad de atentados terroristas en Italia si este país no retiraba a su contingente militar en Irak y, tras un registro policial en su domicilio, le fue encontrado material relacionado con la red extremista Al Qaeda. A pesar de esta situación de alarma, el viceprimer ministro italiano, Gianfranco Fini, señaló que "todos los países son objetivos potenciales para los terroristas y en Italia no existe una amenaza específica".
