LD (EFE) La tensión ha aumentado de nuevo entre Georgia y Osetia del Sur, tras el despliegue de más tropas en la frontera administrativa entre ese país del Cáucaso Sur y su autonomía separatista que quiere la integración con Rusia.
Según denunció Tiflis, milicianos separatistas ocuparon posiciones en una carretera secundaria en construcción que desde Georgia conduce al interior de Osetia del Sur rodeando Tsjinvali, la capital oseta, y que es custodiada por tropas georgianas. Los rebeldes, que llegaron en automóviles, finalmente dejaron esa zona situada muy cerca de la frontera administrativa, pero las autoridades georgianas aprovecharon para enviar nuevas unidades al área, elevando la tensión con Tsjinvali y Moscú.
Actualmente, un cuarenta por ciento del territorio osetio es controlada por Georgia y el resto está en manos de separatistas. Además, en la zona hay tropas rusas que dicen actuar como fuerzas de interposición para impedir que se reanuden los combates que en 1992 llevaron a la secesión de facto de Osetia del Sur, pero a las que Tiflis acusa de "garantizar" el independentismo oseta.
