LD (Agencias) Emisoras locales de la ciudad de Bunia, en el nordeste del Congo, han informado de que veinte personas han muerto tras los combates entre las milicias de las etnias hema y lendu. La situación ha provocado que miles de residentes se hayan concentrado en el aeropuerto y otros recintos protegidos por los 400 efectivos de la Misión de Observación de la ONU en Congo (MONUC), principalmente soldados uruguayos. Otros huyeron hacia la frontera con Uganda, a unos ochenta kilómetros al este. En esa zona se encuentran unos 15.000 congoleños oriundos de la conflictiva región de Ituri, cuya capital es Bunia, que temían el estallido de la violencia tras la retirada de los soldados ugandeses en cumplimiento de los acuerdos de paz para la RDC.
Los presidentes de Uganda, Yoweri Museveni, y Ruanda, Paul Kagame, que han respaldado grupos rivales de rebeldes en Congo, celebraron este jueves en Londres una reunión con la mediación del Gobierno británico, en la que reafirmaron su apoyo al proceso de paz en Congo a la vez que intentaron superar el enfrentamiento entre sus dos países. Pese a la presencia de efectivos de MONUC en el aeropuerto de Bunia, el avión del ministro congoleño para los Derechos Humanos, Ntumba Luaba, fue alcanzado por balas cuando se disponía a aterrizar y tuvo que dar la vuelta.
La MONUC ha reconocido que no dispone de efectivos suficientes para controlar la situación en Bunia, donde ya tenía previsto para finales de esta semana el despliegue de unos centenares más de soldados. También ha expresado su preocupación ante la falta de suministro de alimentos para los 300.000 habitantes de la ciudad, debido a la violencia.
Los presidentes de Uganda, Yoweri Museveni, y Ruanda, Paul Kagame, que han respaldado grupos rivales de rebeldes en Congo, celebraron este jueves en Londres una reunión con la mediación del Gobierno británico, en la que reafirmaron su apoyo al proceso de paz en Congo a la vez que intentaron superar el enfrentamiento entre sus dos países. Pese a la presencia de efectivos de MONUC en el aeropuerto de Bunia, el avión del ministro congoleño para los Derechos Humanos, Ntumba Luaba, fue alcanzado por balas cuando se disponía a aterrizar y tuvo que dar la vuelta.
La MONUC ha reconocido que no dispone de efectivos suficientes para controlar la situación en Bunia, donde ya tenía previsto para finales de esta semana el despliegue de unos centenares más de soldados. También ha expresado su preocupación ante la falta de suministro de alimentos para los 300.000 habitantes de la ciudad, debido a la violencia.