El pago de los Programas Especiales de armamento. Ése será el gran problema al que tendrá que hacer frente el ministerio de Defensa en los próximos años y que el recorte en los presupuestos de 2012 empieza a complicar de manera preocupante. En total, suponen unos compromisos de pago de 27.000 millones que el departamento que dirige Pedro Morenés tendrá que hacer frente durante los próximos quinquenios.
Entre ellos se encuentran la flor y nata de los programas de modernización de las Fuerzas Armadas, como el caza de combate Eurofighter, los helicópteros de ataque Tigre, los helicópteros polivalentes NH90, los aviones de transporte A400M, las fragatas F-100, el BPE Juan Carlos I, los Buques de Acción Marítima (BAM), los vehículos Pizarro o los misiles Iris-T, Taurus y Spike, entre otros.
El secretario de Estado de Defensa, Pedro Arguelles, compareció este martes en la comisión de Defensa del Congreso de los Diputados para señalar que los presupuestos del ministerio tan sólo destinan una partida de 4,95 millones de euros para estos programas, una cantidad que permite "cubrir los gastos operativos que nos corresponden por nuestra participación en las distintas agencias internacionales".
Ante esta situación, adelantó que el ministerio va a trabajar en dos líneas para intentar afrontar a futuro los pagos comprometidos. Por un lado, tomando "medidas paliativas" para que la situación "no se agrave". En este sentido, destacó la partida de 309 millones que aportará el ministerio de Industria para el programa del Eurofighter, y que fue aprobado en el Consejo de Ministros del 9 de marzo por el Gobierno. Por otro lado, "fortalecer la supervisión y control de los programas", para "evitar desviaciones presupuestarias" que hagan más complicada aún la situación.
El número dos de Defensa dijo que en 2012habrá que afrontar el pago de 2.370 millones de estos Programas Especiales, para los que sólo hay presupuestados 507 millones que aportará el ministerio de Industria, entre los que se incluyen los 309 extras del programa del Eurofighter. El resto, 1.858 millones de euros, no se sabe todavía de dónde se van a conseguir.
Por ello, adelantó que una vez superado el trámite de la aprobación de las cuentas públicas, se "iniciarán conversaciones" con los ministerios de Hacienda, Economía, e Industria, así como con los grupos parlamentarios y la Industria de Defensa, "para explorar vías que nos permitan responder a los compromisos adquiridos en los últimos años, y que puedan sentar las bases para un marco financiero e industrial más sostenible a largo plazo". "Se trata de un reto que debe ser tratado como una política de Estado", añadió.