Lo que tendría que hacer el Constitucional es salvar todo lo posible la Constitución, no el estatut. Esa es su razón de existir, de lo contrario mejor desmóntese.
Kosovo ha logrado su independencia. Dicen que están muy contentos. Y el número de jóvenes que piensan huir de su Kosovo va en aumento.
Oido al parche Cataluña.
¿bilateralidad" entre España y Cataluña? Y las otras 16 Comunidades se van a chupar los dedos..¡¡
Esta vez coincido contigo Espon.
Sólo "reinterpretan" (me da miedo la palabra) o anulan unos cuarenta artículos de unos ciento veinte impugnados por el PP. Qué no se meterá en ese sesenta por ciento que queda. Si se acepta la bilateralidad, España como estado, país y nación se va al carajo, no hay más solución. No me lo puedo creer. Esto es para exiliarse a Tanzania. Qué vergüenza y asco da ya todo. Y, para colmo, la situación económica del país, camino de otra Argentina. Como decía Jaime Gil de Biedma, "De todas las historias de la historia, la más triste sin duda es la de España".
Lo que el TC parece buscar es el ESTATUT CATALANISTA
De catalán, nada. De catalanista, lo que quieran. De solidaridad con los pueblos de España, un comino. De independencia, cantidad. De justicia ciega, caray. De justicia miope, atún. De justicia parcial, tela.
La señora Emilia Casas, presidenta del Tribunal Constitucional, parece predispuesta a retrasar, todavía más, el fallo sobre el Estatut catalanista. Más aún. Si se lo pide el Gobierno de este Estado policial en que Zapatero ha convertido a España, cómo se va a negar la señora Casas. Por favor. De alfombra. Ante el rodillo zapateril, tapiz. Si hace faltan trapos, allá van también. Lo que mande el señor.
Los catalanistas del tripartito son catalanes de tercera profesión a los que la política ha ascendido, en los despachos, a profesionales de primera división. Salto cualitativo y cuantitativo. Para qué la universidad y el esfuerzo del estudio, si Benach o Montilla se pasan por el arco del triunfo las instituciones académicas. Reglas de juego a ellos. Quien ose criticar a estos desahogados, sepan que repudian a Cataluña. Así que cuidado. Mucho cuidado.
El Estatut es la coartada de estos catalanistas de boquilla y catalanes de conveniencia. Les importa a ellos Cataluña lo mismo que les interesa España. Nada. Se sirven de una y de otra para colmar sus espurios intereses. Ahora que se le agota el mandato presidencial, el gran Laporta se agrega al pelotón de cabeza de los vividores. Don Joan quiere un ascenso económico tras su paso por el Barça. Enarbolará, pues, la bandera del Estatut y lo que sea preciso con tal de ganarse unas monedas en forma de prebendas. Si ha de aliarse con los Millet, los Prenafeta, los Bartomeu y otros gañanes de su estirpe, adelante con los faroles. -Que están imputados, Laporta. -Falsa imputación. A mí los almogávares. Imputan a Cataluña. Almogávares a mí.
Mientras, doña Emilia Casas, la excelentísima señora Casas, a congelar el Estatut. Qué vergüenza se siente al comprobar, de facto, lo que se malicia, de mente. Qué vergüenza, doña Emilia, qué vergüenza. Que la categoría del pueblo catalán -español hasta la médula- se vea menospreciada por culpa de individuos de esta laya, tiene narices. Narices, muchas. Olfato, poco. Lo digo por el hedor. Emilia, saca el Estatut del congelador y si sale podrido, ya se verá. Emilia. Lo que pueda, se aproveche. Lo putrefacto, a la basura. Lejos.
Un saludo.
Pero, si tienen mayoría en el TC. ¿Cómo es que lo la emplean? ¿No emplean su mayoría en ésa bomba por algún motivo?
Me parece inaceptable que los JUECES trabajen para el Gobierno
Lo que diga el Pis lo cojo con pinzas por si me mancha...
Lo que diga el Tribunal Constitucional sobre el "estatut" nos mostrará el grado de estupidez de los españoles en pensar absurdamente que se puede contentar a los nacionalistas y dejarlos satisfechos de una vez por todas. Los nacionalistas son insaciables y toda cesión supone darles la razón y aumentar el estímulo para nuevas concesiones.
Si los magistrados aprueban ese engendro soberanista, enviarán a ETA este mensaje: seguid matándonos, que los españoles somos imbéciles. El estatut era el regalo-reclamo-cebo de Zapatero a ETA, que como no llegó al destinatario final, se lo va a quedar el nacionalismo catalán que actuó de tapadera.