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ERC ve a Cataluña en el "corredor de la muerte" tras la ausencia de fallo sobre el Estatuto

Puigcercós ha dicho que el “esperpéntico” retraso en la sentencia delata al TC como institución “ilegítima, caducada y precaria”, amenazando con que una sentencia adversa redundará en un “distanciamiento mutuo”. PP y PSOE se han aliado para recortarlo.

El presidente de ERC y candidato a la Generalidad, Joan Puigcercós, ha dicho que Cataluña vive en "el corredor de la muerte" a la espera de que el Tribunal Constitucional (TC) emita una sentencia sobre el Estatuto, después de que el viernes fracasara tras un nuevo intento de dictar sentencia.

En una visita a Reus (Tarragona), acusó al PSOE y al PP de estar aliados para recortar el Estatuto y "hacer daño a Cataluña", y solicitó que los partidos catalanes presenten una propuesta para reformar el TC dada la "situación humillante y provisional" que vive.

Puigcercós consideró que el nuevo ponente del Estatuto, Guillermo Jiménez, se sitúa en el "ala anticatalanista del tribunal", y pidió que "nadie se engañe", ya que se mostró convencido de que el texto será recortado.

Durante una comida del partido en la que entregaron insignias a las personas con más de 25 años de militancia, el secretario general, Joan Ridao, aseguró que el fracaso del TC demuestra que la vía autonomista está agotada, y que esto no depende de que el Alto Tribunal renueve sus miembros o dicte sentencia en un futuro.

A su juicio, el TC ha subido un peldaño más en la carrera del desprestigio, y añadió: "es ilegítimo, caducado y precario". Por ello, le urgió a sentenciar cuanto antes para acabar con un retraso "esperpéntico", tras opinar que alguien pretende ir a las elecciones sin enseñar todas las cartas. "Queremos que el Estatut salga ya del pasillo de la muerte para que en las próximas elecciones todos los partidos digamos donde queremos ir", sentenció.

Recordó que, aunque ellos no votaron a favor del Estatuto, ERC reclama respeto por la voluntad del pueblo catalán, y señaló que se está ante el problema "más grave institucional y político" de los últimos 30 años, porque el conjunto del catalanismo ha dejado claro que la única sentencia buena sobre el Estatuto "es aquella que no toque ni un punto ni una coma".

El portavoz republicano auguró que una sentencia adversa sentará las bases de un proceso de "distanciamiento mutuo", y demostrará que no hay ninguna voluntad por parte de las instituciones del Estado de buscar el encaje, que es lo que el catalanismo intenta desde hace 150 años. "Ya no es posible, lo hemos intentado pero el encaje no es posible", lamentó.

Ridao clausuró la comida confiando en que este sentimiento de preocupación e incertidumbre se acabará convirtiendo en una "recuperación de la autoestima colectiva".

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