L D (EFE) EA presentó este jueves su documento sobre el marco jurídico-político en la actual coyuntura, formulado como un "Estado Libre de Euskadi" asociado a España, aunque su presidenta, Begoña Errazti, aclaró que sólo es un "documento de trabajo" y que su partido apoyará la propuesta del Gobierno Vasco. Errazti presentó en Vitoria este documento, "Ley de Soberanía Vasca y de Relaciones con el Estado español", que ya le han presentado al lehendakari, Juan José Ibarretxe, y que, según explicó, es "única y exclusivamente un documento de trabajo para el debate".
Por ello, este texto, formulado en 94 artículos y disposiciones adicionales y transitorias, así como una derogatoria del actual Estatuto y otra final, no se presentará en el Parlamento como enmienda a la totalidad al proyecto de ley que aprobará el Gobierno Vasco, al que apoya junto con el PNV y EB/IU, el próximo día 25. Reconoció que el objetivo final de Eusko Alkartasuna es lograr un "estado vasco independiente", pero insistió en que en el "paso intermedio en que estamos" hay que "trabajar por un proceso posibilista". Así, Errazti explicó que su formación podía haber optado por otro documento, como "una constitución vasca", pero aclaró que "eso vendrá en otra fase" y que por ello no se puede hablar de "renuncia" en los postulados de cada uno.
El castellano, "también" lengua oficial
El documento "de trabajo" de EA tiene como artículo primero el "derecho de libre determinación del pueblo vasco" y establece en su segundo artículo que en virtud de la presente ley "se constituye el Estado Libre de Euskadi, asociado al Reino de España, como manifestación de su derecho a la libre determinación y a la actualización de sus derechos históricos al autogobierno". Este Estado estaría integrado por Álava, Vizcaya y Guipúzcoa y, "en su caso", la Comunidad Foral de Navarra y establecería "vínculos permanentes de cooperación" con el sur de Francia. Establece el texto que el euskera es la lengua "nacional propia de Euskal Herria", aunque se añade que el castellano "tiene la condición de lengua oficial" también.
Como la propuesta del lehendakari, el texto de EA reconoce la nacionalidad vasca que sería "compatible con la nacionalidad española y con cualquier otra nacionalidad". Se establece que tendrán la ciudadanía vasca todas las personas con vecindad administrativa en cualquier municipio del Estado libre de Euskadi y nacionalidad quienes "dispongan de ella conforme a los previsto en el régimen anteriormente vigente y las personas nacidas en Euskadi residentes fuera, así como sus descendientes si así lo solicitan". También se adquiriría mediante solicitud de los ciudadanos de "Euskal Herria en los términos en los que lo disponga una ley del Parlamento Vasco", en referencia a los ciudadanos de Navarra y el sur de Francia.
Si todo falla, independencia por la vía rápida
El proyecto de EA establece que la creación de partidos políticos es "libre aún cuando sus objetivos sean contrarios a lo previsto en la presente ley", aunque advierte que quedarían prohibidas las "asociaciones u organizaciones que propugnen la violencia armada como medio de actuación política". Establece la competencia exclusiva del su Estado en materia de seguridad, de seguridad social y crea un poder judicial propio, en el que se regularía el Ministerio fiscal y se asumirían las competencias de la Audiencia Nacional.
Por lo que respecta a las relaciones con el Estado español y la UE, el documento de EA sostiene que se articularían "desde el reconocimiento mutuo de las respectivas soberanías". Recoge la posibilidad de que España incumpliera el pacto lo que abriría la posibilidad del ejercicio del derecho de libre determinación, previa consulta a la ciudadanía, en "cualesquiera otras modalidades".
Por ello, este texto, formulado en 94 artículos y disposiciones adicionales y transitorias, así como una derogatoria del actual Estatuto y otra final, no se presentará en el Parlamento como enmienda a la totalidad al proyecto de ley que aprobará el Gobierno Vasco, al que apoya junto con el PNV y EB/IU, el próximo día 25. Reconoció que el objetivo final de Eusko Alkartasuna es lograr un "estado vasco independiente", pero insistió en que en el "paso intermedio en que estamos" hay que "trabajar por un proceso posibilista". Así, Errazti explicó que su formación podía haber optado por otro documento, como "una constitución vasca", pero aclaró que "eso vendrá en otra fase" y que por ello no se puede hablar de "renuncia" en los postulados de cada uno.
El castellano, "también" lengua oficial
El documento "de trabajo" de EA tiene como artículo primero el "derecho de libre determinación del pueblo vasco" y establece en su segundo artículo que en virtud de la presente ley "se constituye el Estado Libre de Euskadi, asociado al Reino de España, como manifestación de su derecho a la libre determinación y a la actualización de sus derechos históricos al autogobierno". Este Estado estaría integrado por Álava, Vizcaya y Guipúzcoa y, "en su caso", la Comunidad Foral de Navarra y establecería "vínculos permanentes de cooperación" con el sur de Francia. Establece el texto que el euskera es la lengua "nacional propia de Euskal Herria", aunque se añade que el castellano "tiene la condición de lengua oficial" también.
Como la propuesta del lehendakari, el texto de EA reconoce la nacionalidad vasca que sería "compatible con la nacionalidad española y con cualquier otra nacionalidad". Se establece que tendrán la ciudadanía vasca todas las personas con vecindad administrativa en cualquier municipio del Estado libre de Euskadi y nacionalidad quienes "dispongan de ella conforme a los previsto en el régimen anteriormente vigente y las personas nacidas en Euskadi residentes fuera, así como sus descendientes si así lo solicitan". También se adquiriría mediante solicitud de los ciudadanos de "Euskal Herria en los términos en los que lo disponga una ley del Parlamento Vasco", en referencia a los ciudadanos de Navarra y el sur de Francia.
Si todo falla, independencia por la vía rápida
El proyecto de EA establece que la creación de partidos políticos es "libre aún cuando sus objetivos sean contrarios a lo previsto en la presente ley", aunque advierte que quedarían prohibidas las "asociaciones u organizaciones que propugnen la violencia armada como medio de actuación política". Establece la competencia exclusiva del su Estado en materia de seguridad, de seguridad social y crea un poder judicial propio, en el que se regularía el Ministerio fiscal y se asumirían las competencias de la Audiencia Nacional.
Por lo que respecta a las relaciones con el Estado español y la UE, el documento de EA sostiene que se articularían "desde el reconocimiento mutuo de las respectivas soberanías". Recoge la posibilidad de que España incumpliera el pacto lo que abriría la posibilidad del ejercicio del derecho de libre determinación, previa consulta a la ciudadanía, en "cualesquiera otras modalidades".