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Llegan al sur del Líbano los primeros soldados en el mayor desembarco militar español de los últimos 30 años

Las primeras tropas españolas que participarán en el contingente internacional de interposición en el sur de Líbano han llegado a las costas de la localidad de Tiro, en el sur del país. Los efectivos tienen previsto descargar todo su material transportado en los buques "Galicia", "Pizarro" y "Patiño", y la fragata "Juan de Borbón", antes de dirigirse al que será su emplazamiento definitivo en la ciudad de Taibe, un lugar que repersenta una gran complicación por ser bastión de los terroristas de Hezbolá. La avanzadilla está compuesta de la Brigada de Infantería de la Marina, de 490 hombres, más 76 del Ejército de Tierra para labores logísticas.

LD (EFE) Los 566 soldados españoles de los 1.100 efectivos del contingente de interposición bajo mandato de la ONU que España enviará al sur del Líbano, han desembarcado en la playa del "Rest House Hotel" ubicado en las costas de la localidad de Tiro. Esas tropas tienen previsto descargar todo su material entre este viernes y sábado antes de dirigirse al que será su emplazamiento definitivo en esta misión en la ciudad de Taibe.

 
El coronel Luis Meléndez, jefe del contingente español, éste se establecerá en una zona cercana a la localidad de Markaba, al sureste de Marjayún, y cuya población es en su mayoría chií. Las primeras tropas llegaron a las costas de Tiro en cuatro embarcaciones, y se espera que el desembarco de material y hombres dure 48 horas.
 
Entre este viernes y sábado los militares españoles, en su mayoría de la Armada, se irán trasladando hacia la zona donde establecerán su cuartel general en Markaba, y una parte de ellos pernoctará en la playa en Tiro.
 
El contingente se quedará un mes y medio en dicha región y será sustituido a finales de octubre por una brigada de la Legión que formará el grueso de los 1.100 militares españoles que se desplegarán en el sur libanés, según el teniente coronel José Luis Puig, el jefe de a Oficina de Información del contingente.

Taibe, feudo de Hezbolá

La localidad de Taibe, donde finalmente se va a desplegar el contingente español en el Líbano, presenta una doble dificultad al estar casi pegada a la frontera con Israel y ser un bastión de la organización terrorista de Hezbolá. En un principio se barajó que el contingente estuviera en Marjayún, población que está a unos 30 kilómetros al norte de Taibe, y que presentaba características más "amables", no solo por estar más lejos de la frontera, sino porque su población es mayoritariamente cristiana.

El cónsul honorario de España en el sur del Líbano, Adel Huseirán, explicó que la zona de Taibe y sus alrededores es un feudo absolutamente fiel a los terroristas de Hezbolá, y ello pese a que algunas familias hayan perdido a varios miembros en la reciente guerra. El alcalde, por ejemplo, es miembro del movimiento terrorista. Visitantes que han recorrido Taibe explicaron que la ciudad (de algo más de diez mil habitantes, aunque ahora solo hayan vuelto 6.000) fue una de las más castigadas durante la reciente guerra.

Abundan en sus calles banderas del grupo terrorista y fotografías de los "mártires", así como de su líder Hasan Nasrala, incluso en el mismo cementerio, según estos visitantes. Un hospital de campaña iraní se ha instalado en el centro de la ciudad para atender a los enfermos (dijeron los citados visitantes), lo que confirma la alianza existente entre los terroristas libaneses y sus mentores iraníes. Taibe sufrió mucho durante la guerra por ser una de las puertas de acceso al río Litani, que Israel considera vital para su propia seguridad: de hecho, uno de los puntos claves de la resolución 1.701 sobre el Líbano establecía que el Ejército libanés se desplegara al sur de este río y desplazará a los terroristas de Hezbiolá.

El Ejército israelí penetró en la pasada guerra desde la cercana frontera y protagonizó durísimos enfrentamientos en Taibe y la vecina Merkaba, donde perdieron varios carros de combate. Según dijo el pasado jueves el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, el contingente español tendrá no solo misiones de estabilización del alto el fuego, sino que también se encargará de reconstruir cinco poblados en esta zona tan castigada.

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