Maragall admite que con su financiación a la carta "alguien va a tener que recibir menos"

(Libertad Digital) Tras el debate en el Congreso sobre el Estatuto catalán, el director del periódico ABC, Ignacio Camacho, entrevista este domingo al presidente del PSC, Pasqual Maragall. Éste explica al diario por qué, a diferencia de Ibarretxe, no defendió el proyecto: "Queríamos escenificar que éste es un gobierno tripartito, y que además el Estatuto se ha hecho con un cuarto partido, con equilibrios muy complicados". De cualquier modo, Maragall, ha quedado muy satisfecho con las intervenciones de sus compañeros de gobierno, incluida la de Carod Rovira.

 

El Estatuto catalán, ha provocado que voces discordantes con el proyecto, dentro del propio partido socialista, salieran a la luz. Ante esta cuestión Maragall es rotundo: "yo soy militante del PSC. El PSC tiene un acuerdo de largo alcance con el POSE, en el que, por ejemplo, no figura que debamos renunciar definitivamente a tener un grupo parlamentario propio".

 

Preguntado sobre qué es lo que no admitiría que se cambiase del texto, el dirigente del PSC responde que los "temas sustanciales son la nación y el dinero. Luego, las competencias. No pasaremos por no ser nación y por un sistema fiscal y financiero insuficiente". En cuanto a la financiación y al "tema del dinero", Pasqual Maragal afirma que "en Cataluña lo hay es una sensación generalizada de que se ha recibido poco", y continúa diciendo que "si se aplica lo que nosotros decimos, alguien va a tener que recibir menos, probablemente, y digamos que alguno subirá sus ingresos. Es un progreso progresivo, dilatado".

 

El dirigente socialista tampoco pasará por renunciar al tema nación. Para Maragal "lo divertido es lo distinto...ser iguales es un aburrimiento...". "Nosotros somos una nación de naciones, que tiene un Estado y varias naciones; tres seguras, y alguna probable", afirma. Según él "para la gran mayoría de los catalanes, representados por los partidos políticos democráticamente elegidos, está muy claro que Cataluña es una nación y España, una nación de naciones". Asimismo, el líder del PSC, realiza una peculiar y personal lectura de la Carta Magna y asegura que "la Constitución decía que hay nacionalidades y regiones, y luego lo que ha pasado es ha habido un cierto relajo. Nos dejamos ir un poco todos y desapareció ese dualismo que hacía las paces".

 

A la pregunta de si admite que el Estatuto reforma la Constitución de manera encubierta, Maragall lo niega rotundamente y continúa afirmando que "lo que dice ahora el Estatuto restablece lo que decía la Constitución y se fue deteriorando: que los territorios que habían plebiscitado sus Estatutos seguían una vía distinta a los otros". Este "privilegio" rompe con la igualdad entre todos los ciudadanos, pero Pasqual Maragall dice que "diferencias, haberlas haylas". "Los andaluces o extremeños no tienen que aceptar el Estatuto. Quien lo tiene que aceptar es el Congreso".