(Libertad Digital)
Durante el último mes, Modesto Nolla se ha dado a conocer a los ciudadanos por su papel de
interrogador
en nombre del PSOE en la Comisión de Investigación de la Asamblea de Madrid. Cuando se iniciaron las comparecencias, Nolla se mostraba totalmente convencido de que detrás de la
espantada
de Tamayo y Sáez había una “trama” político-inmobiliaria relacionada con el Partido Popular. Sin embargo, ahora parece que no lo tiene tan claro. En declaraciones a la emisora
Catalunya Informació
, Nolla ha dicho que será difícil alcanzar “conclusiones definitivas” en este caso.
No obstante, el portavoz socialista ha matizado que, para aclarar los motivos que llevaron a Tamayo y Sáez a abandonar la Asamblea de Madrid, el Partido Popular no les ha facilitado la tarea, ya que ha puesto obstáculos a la investigación. Según su punto de vista, todo indica que las relaciones del diputado Eduardo Tamayo los días previos a su “traición” iban “hacia el Partido Popular y el negocio inmobiliario”, aunque se limitó a hablar de indicios, ya que el PSOE no ha podido demostrar hasta ahora que sea verdad la teoría de la “trama” que acuñaron José Blanco y Rafael Simancas en los días posteriores a la espantada de Tamayo y Sáez.
Por último, Nolla se quejó de la actuación del fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, por considerar que no actúa con independencia del Gobierno y porque “sirve a unos intereses que no son los de la verdad”.
No obstante, el portavoz socialista ha matizado que, para aclarar los motivos que llevaron a Tamayo y Sáez a abandonar la Asamblea de Madrid, el Partido Popular no les ha facilitado la tarea, ya que ha puesto obstáculos a la investigación. Según su punto de vista, todo indica que las relaciones del diputado Eduardo Tamayo los días previos a su “traición” iban “hacia el Partido Popular y el negocio inmobiliario”, aunque se limitó a hablar de indicios, ya que el PSOE no ha podido demostrar hasta ahora que sea verdad la teoría de la “trama” que acuñaron José Blanco y Rafael Simancas en los días posteriores a la espantada de Tamayo y Sáez.
Por último, Nolla se quejó de la actuación del fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, por considerar que no actúa con independencia del Gobierno y porque “sirve a unos intereses que no son los de la verdad”.