Y tu, por las carteras de todos los españoles, catalanes incluidos. Se te olvida Celipito y las tarjetas de Carol.
Si la envidia fuera tiña ya sabes lo que serías tú.
¿Acaso no te paseas por el ghetto como si fueras un pequeño dictador?
¿acaso cuando el pucherazo de Banca Catalana no te paseastes a la Justicia por donde la espalda pierde su nombre, y todo porqué
eras de la casta de los intocables?
Realmente hay gente que tiene poca memoria y mucho resentimiento, la suerte es que en el ghetto nos conocemos todos.
Este individuo como siempre fue rico, no tiene ningún problema.