La irresponsabilidad de Zapatero
Aunque es difícil no sentir pena ante la palabrería estúpida de Zapatero, no pongamos caras lúgubres al oír la palabra "responsabilidad" en boca del presidente más irresponsable que ha dado España en la democracia.
Hace unos meses al acabar un programa de televisión se me acercó un periodista, un cantor de las bondades de Zapatero, y me dijo: "No, amigo, no es tan malo como la gente cree. Tienes que tratarlo de cerca. En las distancias cortas gana mucho. Es un seductor. Atrapa a quien conversa con él." Quien hablaba así se situaba en lo más bajo. Es su condición. Me callé por pudor y, sobre todo, porque me había hecho disfrutar, en un pasado remoto, con algunos giros expresivos de sus columnas. También guardé silencio porque mis palabras podrían asustarlo en exceso y, quizá, su cobardía ya no pudiera hacerla compatible con su edad.
Sin embargo, después de haber leído las declaraciones de Zapatero en Galicia, tengo la necesidad de transmitirle mi opinión de su personaje adorado. Las palabras de Zapatero en la tea gallega no producen hastío sino envilecimiento. Zapatero es una tortura para todos los españoles. La destrucción es su horizonte. Zapatero es mi tortura. Quiero escapar de este hombre, pero no lo consigo. Tanto su presencia como su ausencia me persiguen. Sus acciones son perversas, pero sus palabras nos envilecen. Dice que ha visitado Galicia para "asumir responsabilidades", pero a nadie se le escapa que eso es una frase hecha sin el menor atisbo de verosimilitud. Pues si este hombre supiera lo que esa expresión lleva adentro, convocaría inmediatamente elecciones anticipadas y se largaría a su casa disfrutar de la pensión por haber sido el último presidente de Gobierno, que no ha conseguido destruir por completo España.
Aunque es difícil no sentir pena ante la palabrería estúpida de Zapatero, no pongamos caras lúgubres al oír la palabra "responsabilidad" en boca del presidente más irresponsable que ha dado España en la democracia. Sí, todavía queda algo de lo que nos podemos reír. Sí, gracias a este "enemigo" de España conservamos el gusto por las palabras biliosas y agresivas. Sí, porque existen gentes como Zapatero sentimos el placer de encolerizarnos. En fin, sin Zapatero quizá nos habríamos hecho ya más pesimistas de lo que somos. Mírenlo, pues, por este lado. Hagan, otra vez, de la necesidad virtud; y, por favor, conviertan la cólera que les produce el personaje en remedio contra el hastío de quienes silencian sus tropelías.
Lo más popular
-
Un documento certifica que el hermano de Sánchez atesora dos millones con sólo 273.000 euros en ingresos por su enchufe -
Muere a los 75 años la periodista Victoria Prego -
Vídeo: Elisa Vigil repasa en tres idiomas el ridículo internacional de Sánchez -
La "directiva del desayuno" europea que España está obligada a aplicar en dos años -
El PSOE prepara la primera querella contra un periodista tras la "limpieza" anunciada por Sánchez
Ver los comentarios Ocultar los comentarios