Esperemos que una verdadera elite política liberal sea capaz de argumentar convincentemente, sin miedos ni complejos, por qué hay que reprivatizar la sanidad y la educación, flexibilizar el mercado de trabajo, liberalizar el suelo...
Oliver Serrano Gil
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Minaya dijo el día 8 de Octubre de 2009 a las 15:59:
Sr. Serrano, todo muy coherente... hasta que tuvo usted que enseñar la patita progre para demostrar que le siguen afectando los maricomplejos. ¿Así que hay que "desconservadurizarse"- o sea, a parecer progres, como dice Arriola?
Por otra parte, si según usted el matrimonio es un mero contrato en el que las partes se reconocen mutuamente unos derechos y obligaciones ¿me quiere decir que puñetas pinta el Estado regulándolo? Si fuese usted un liberal coherente que no se ve en la obligación de pedir perdón a los progres por serlo, propondría que el matrimonio civil desapareciese del ordenamiento jurídico (como lo estuvo hasta el siglo XIX), y que volviese a ser un asunto estrictamente social. En el momento en que el Estado no tenga nada que decir, los españoles en general y los navarros en particular dejaríamos de ser amenazados por la fuerza coactiva del Estado cuando enseñamos a nuestros hijos que los contratos entre homosexuales son de naturaleza distinta a los que unen a una mujer con su marido.
Mucho liberal, pero al final maricomplejines. PP en estado puro.
Sr. Serrano, todo muy coherente... hasta que tuvo usted que enseñar la patita progre para demostrar que le siguen afectando los maricomplejos. ¿Así que hay que "desconservadurizarse"- o sea, a parecer progres, como dice Arriola?
Por otra parte, si según usted el matrimonio es un mero contrato en el que las partes se reconocen mutuamente unos derechos y obligaciones ¿me quiere decir que puñetas pinta el Estado regulándolo? Si fuese usted un liberal coherente que no se ve en la obligación de pedir perdón a los progres por serlo, propondría que el matrimonio civil desapareciese del ordenamiento jurídico (como lo estuvo hasta el siglo XIX), y que volviese a ser un asunto estrictamente social. En el momento en que el Estado no tenga nada que decir, los españoles en general y los navarros en particular dejaríamos de ser amenazados por la fuerza coactiva del Estado cuando enseñamos a nuestros hijos que los contratos entre homosexuales son de naturaleza distinta a los que unen a una mujer con su marido.
Mucho liberal, pero al final maricomplejines. PP en estado puro.