Menú
Juan Manuel Rodríguez

Los sueños del niño Aznar

Joan Gaspart no está conforme con nada. El presidente del Barcelona, y la dócil prensa deportiva catalana, se han puesto ahora manos a la obra para acabar con los sueños de un inocente niño. ¿Con qué iba a soñar José María Aznar?... Mal le habría ido de haber soñado con convertirse en Inspector de Finanzas del Estado, o Secretario General de Alianza Popular en Logroño. ¿Soñaba de pequeño el Presidente del Gobierno con ser Presidente del Gobierno?... No creo. El niño Aznar soñaba con ser Alfredo di Stéfano, porque el delantero centro del Real Madrid era quien "pitaba" por aquel entonces. Y por eso Gaspart se muerde la lengua. Pues no debería mordérsela y tendría que haber dicho que una cosa son los sueños de un anónimo niño madrileño de principios de los años cincuenta, y otra bien diferente las manifestaciones públicas de aquel mismo niño transformado, cuarenta años más tarde, en Presidente del Gobierno. Otra cosa bien distinta es que a José María Aznar, sobrado como está con su mayoría absoluta y su "canto del cisne" voluntario, le importara un bledo la opinión del presidente del Barcelona.

Gaspart no debe tener excesiva fe en sus propias posibilidades deportivas, ni tampoco en la descentralización política del Estado. Felipe González fue Presidente durante trece años, y a nadie se le ocurrió decir que el Betis era "el equipo del Gobierno". Habría soñado a chufla. El alcalde de Barcelona es un asiduo del palco del Nou Camp... ¿qué pensarán los aficionados del Español? ¿y los madridistas que vivan en Barcelona? Lo más normal es que el actual alcalde de Barcelona, cuando era un niño, soñara con ser Ladislao Kubala. ¿Tendría que morderse la lengua Florentino Pérez por ello?... Puede que lo que esté pensando para sus adentros Joan Gaspart es que la reiteración pública de Aznar y su madridismo confeso no sean "políticamente correctos", pero de ahí a pensar que el Real Madrid es "el equipo del Gobierno" va un largo trecho.

Tras el 3-0 de Roma me esperaba un aluvión de declaraciones en tal sentido, y sin embargo los directivos culés estuvieron sufridos y contenidos. Ahora bien, que nadie dude que si la temporada azulgrana sufre "aluminosis deportiva", Gaspart empleará los sueños del niño Aznar como crea más conveniente en beneficio de sus propios intereses. Nadie ha visto la mano del ministro Alvarez Cascos —otro "merengón" de pro— tras el desastre barcelonista de la Copa del Rey. Nadie la ha visto... por ahora. Todo se andará si es necesario que se ande.

© www.libertaddigital.com 2002
Todos los derechos reservados

Titulares de Libertad Digital
Suscríbase ahora para recibir nuestros titulares cómodamente cada mañana en su correo electrónico. Le contamos lo que necesita saber para estar al día.


!-->

En Deportes

    0
    comentarios