L D (EFE) El euro batió un nuevo récord histórico la pasada semana al cambiarse en Europa a 1,2996 dólares en un clima adverso al dólar, acosado por el enorme déficit fiscal y por cuenta corriente de EEUU y por una mayor implicación política y militar de Washington en Oriente medio ante la posible muerte del líder palestino Yaser Arafat.
Al hablar de la economía global, Trichet pronosticó, en base al consenso alcanzado entre los gobernadores del G-10, que el clima del crecimiento "será muy dinámico y estable en 2005, pero menos que en 2004", que registrará la mayor alza en los últimos 30 años.
Con todo, recomendó mucha cautela por la subida de los precios del petróleo, que puede mermar el crecimiento y acelerar las presiones inflacionistas. Trichet agregó que el G-10 celebra el reciente relajamiento de los precios del crudo y que ha apelado a los participantes del sector a que mantengan esta tendencia a la baja.
Por otra parte, elogió "el impresionante nivel de crecimiento" de gran parte de economías en desarrollo en su objetivo por alcanzar al resto del mundo. Aunque no quiso mencionar ningún país en concreto, reconoció que los gobernadores del G-10 habían comentado la reciente subida de los tipos de interés en China en sus esfuerzos por frenar el recalentamiento de la economía. Coincidiendo con las declaraciones de otros banqueros centrales en este foro, Trichet precisó que hasta la fecha no se han observado "efectos de segunda vuelta" en la inflación derivados de incrementos salariales por el incremento de los precios del petróleo.
Con todo, recomendó mucha cautela por la subida de los precios del petróleo, que puede mermar el crecimiento y acelerar las presiones inflacionistas. Trichet agregó que el G-10 celebra el reciente relajamiento de los precios del crudo y que ha apelado a los participantes del sector a que mantengan esta tendencia a la baja.
Por otra parte, elogió "el impresionante nivel de crecimiento" de gran parte de economías en desarrollo en su objetivo por alcanzar al resto del mundo. Aunque no quiso mencionar ningún país en concreto, reconoció que los gobernadores del G-10 habían comentado la reciente subida de los tipos de interés en China en sus esfuerzos por frenar el recalentamiento de la economía. Coincidiendo con las declaraciones de otros banqueros centrales en este foro, Trichet precisó que hasta la fecha no se han observado "efectos de segunda vuelta" en la inflación derivados de incrementos salariales por el incremento de los precios del petróleo.