L D (Agencias) La violencia no se registró en este caso en Clichy-sous-Bois, donde se generaron esta serie de altercados tras la muerte el jueves pasado de dos adolescentes electrocutados en un transformador cuando se escondían de la policía. Las autoridades habían dispuesto allí un fuerte dispositivo policial para evitarlos.
Diversas localidades del departamento de Seine-Saint-Denis, con mucha población de inmigrantes, fueron el escenario de los desórdenes, que no se tradujeron en enfrentamientos directos entre jóvenes y antidisturbios. Los lugares más afectados fueron Aulnay-sous-Bois y Sevran, además de Neuilly-sur-Marne, Bondy o Blanc-Mesnil, donde se contabilizaron más de 60 vehículos incendiados, incluido un camión.
También hubo algunos disturbios, aunque de menor entidad, en otras ciudades de los departamentos de Val de Marne, Yvelines y Val d'Oise igualmente en la periferia de París, donde se registraron sobre todo incendios de papeleras, informó Efe .
El primer ministro, Dominique de Villepin, recibió este martes a los familiares de los dos adolescentes electrocutados en Clichy-sous-Bois, acompañado del ministro del Interior, Nicolas Sarkozy, al que dichas familias no quisieron ver en solitario el lunes por la forma y fondo de las declaraciones que hizo sobre esos sucesos. Villepin se entrevistó posteriormente con su ministro delegado a la Promoción de la Igualdad de Oportunidades, Azouz Begag, que ha criticado las declaraciones de Sarkozy.
Según los observadores, se trataba de cerrar la polémica dentro de su gabinete. Sarkozy presidió también en la sede de su ministerio una reunión con una treintena de funcionarios, alcaldes de Seine-Saint-Denis y jóvenes de ese departamento, para tratar de "establecer el diálogo" e intentar volver a la calma.
Fuentes del Ministerio explicaron que Sarkozy prometió a los alcaldes que trataría de "aportar las mejores respuestas" en los terrenos del empleo, la educación y los equipamientos públicos, y se habló de la aceleración de la edificación de una comisaría común para Clichy-sous-Bois y Montfermeil.
Villepin ha retrasado en varias horas un desplazamiento a Canadá para estar presente en la sesión de control al Gobierno en la Asamblea Nacional, donde se esperan explicaciones sobre los disturbios que se han desencadenado en la periferia norte de París desde el jueves, y sobre la polémica política que han generado.
Diversas localidades del departamento de Seine-Saint-Denis, con mucha población de inmigrantes, fueron el escenario de los desórdenes, que no se tradujeron en enfrentamientos directos entre jóvenes y antidisturbios. Los lugares más afectados fueron Aulnay-sous-Bois y Sevran, además de Neuilly-sur-Marne, Bondy o Blanc-Mesnil, donde se contabilizaron más de 60 vehículos incendiados, incluido un camión.
También hubo algunos disturbios, aunque de menor entidad, en otras ciudades de los departamentos de Val de Marne, Yvelines y Val d'Oise igualmente en la periferia de París, donde se registraron sobre todo incendios de papeleras, informó Efe .
El primer ministro, Dominique de Villepin, recibió este martes a los familiares de los dos adolescentes electrocutados en Clichy-sous-Bois, acompañado del ministro del Interior, Nicolas Sarkozy, al que dichas familias no quisieron ver en solitario el lunes por la forma y fondo de las declaraciones que hizo sobre esos sucesos. Villepin se entrevistó posteriormente con su ministro delegado a la Promoción de la Igualdad de Oportunidades, Azouz Begag, que ha criticado las declaraciones de Sarkozy.
Según los observadores, se trataba de cerrar la polémica dentro de su gabinete. Sarkozy presidió también en la sede de su ministerio una reunión con una treintena de funcionarios, alcaldes de Seine-Saint-Denis y jóvenes de ese departamento, para tratar de "establecer el diálogo" e intentar volver a la calma.
Fuentes del Ministerio explicaron que Sarkozy prometió a los alcaldes que trataría de "aportar las mejores respuestas" en los terrenos del empleo, la educación y los equipamientos públicos, y se habló de la aceleración de la edificación de una comisaría común para Clichy-sous-Bois y Montfermeil.
Villepin ha retrasado en varias horas un desplazamiento a Canadá para estar presente en la sesión de control al Gobierno en la Asamblea Nacional, donde se esperan explicaciones sobre los disturbios que se han desencadenado en la periferia norte de París desde el jueves, y sobre la polémica política que han generado.