Menú

El IPC cae en EEUU por segundo mes consecutivo y se sitúa en el 1,3 por ciento

El IPC de Estados Unidos descendió un 0,5 por ciento en octubre y se situó en el 1,3 por ciento en tasa interanual. Se trata de la segunda caída mensual consecutiva del indicador, que se recortó un 0,5 por ciento en el pasado septiembre, mes en el que alcanzó un 2,1 por ciento en tasa interanual. Este retroceso de la inflación obedece principalmente al recorte de los precios de la energía, que descendieron un 7 por ciento gracias a la escalada bajista de los precios del petróleo.

El IPC de Estados Unidos descendió un 0,5 por ciento en octubre y se situó en el 1,3 por ciento en tasa interanual. Se trata de la segunda caída mensual consecutiva del indicador, que se recortó un 0,5 por ciento en el pasado septiembre, mes en el que alcanzó un 2,1 por ciento en tasa interanual. Este retroceso de la inflación obedece principalmente al recorte de los precios de la energía, que descendieron un 7 por ciento gracias a la escalada bajista de los precios del petróleo.
LD (Europa Press) La inflación subyacente, que excluye energía y alimentos frescos, se incrementó un 0,1 por ciento en octubre, su menor aumento en 13 meses, y se situó en un 2,7 por ciento en tasa interanual.
 
Por otro lado, las peticiones de desempleo semanales descendieron en 2.000 unidades hasta llegar a 308.000, el nivel más bajo en un mes. Se trata de una cifra optimista pues muestra el buen estado del mercado laboral estadounidense a pesar de la ralentización económica.
 
Principal precupación de la Reserva Federal
 
La moderación de las presiones inflacionistas supone un alivio para la Reserva Federal norteamericana (Fed) y le podría dar margen para subir tipos en el futuro.
 
De hecho, la Fed expresó ayer sus preocupaciones sobre los riesgos inflacionistas en las actas de su reunión de finales de octubre, en la que decidió mantener los tipos de interés en el 5,25 por ciento.
 
A pesar de la benéfica influencia del descenso de los precios del petróleo, la institución indica que "los riesgos inflacionistas permanecen" y que la magnitud de la evolución del precio del dinero dependerá directamente de "la evolución de las previsiones de inflación y de crecimiento económico".
 
"Todos los miembros coinciden en que los riesgos de afrontar la reducción anticipada de la inflación siguen siendo la principal preocupación", concluían las actas.

Temas

0
comentarios