Se podrán dañar los templos (Dios no quiera) y a los sucesores de Pedro, y a los católicos que estén o no allí , pero la Fe, la Palabra, el Amor, la Caridad, las Obras, el Perdón.... seguirán intactos, como la historia misma, eso no se podrá borrar..... será como plantar semillas de santos, la vida eterna, la resurrección de que habla el evangelio seguirá intacta, solo saldrá a la luz en ese preciso instante el odio, el rencor, las ganas de apagar la Luz de la fe que algún dia triunfará sobre las tinieblas, en toda la Tierra.
Esperamos que el beato Juan Pablo II nos proteja.
Pero ya es Beato???