
Una enfermedad viral que provoca la aparición de tumores similares a verrugas ha sido identificada en ardillas grises en diversas zonas de Estados Unidos y Canadá. Los animales, avistados en patios traseros y entornos urbanos, presentan lesiones supurantes y pérdida de pelo, lo que ha generado inquietud entre vecinos y usuarios de redes sociales, según han informado medios como el Daily Mail.
La afección observada en estas ardillas se conoce como fibromatosis de la ardilla y está causada por un leporipoxvirus, según han explicado biólogos del Departamento de Pesca Continental y Vida Silvestre de Maine en el medio Bangor Daily News. Según explican los expertos, este virus provoca la aparición de tumores verrugosos en la piel que, aunque de aspecto llamativo, no suelen afectar a órganos internos ni comprometer la supervivencia del animal en la mayoría de los casos. Además, cabe destacar que no representan un riesgo para los humanos ni para otras especies domésticas.
Los primeros casos documentados se remontan al verano de 2023, pero los avistamientos han aumentado de nuevo en los últimos meses. Los animales han sido detectados principalmente en Maine, Michigan, Wisconsin y zonas de Canadá, según recoge el New York Post, que también cita informes del Laboratorio de Salud de Vida Silvestre de Cornell.
Primero los conejos zombie ahora las ardillas. Que carajos está pasando??? #TheLastOfUs is real pic.twitter.com/telGtLEaz3
— A. Spireli 🇺🇸🇻🇪🇮🇹MAGA (@spireli) August 18, 2025
Las redes sociales y el apodo de "ardillas zombi"
La apariencia de los animales, con llagas visibles en la cara, los párpados y las extremidades, ha hecho que algunos usuarios en redes sociales se refieran a ellos como "ardillas zombi". No obstante, los expertos subrayan que se trata de una enfermedad vírica natural, que no debe generar alarma ni requiere intervención humana directa.
"Los fibromas pueden afectar la visión, la alimentación, la respiración y el movimiento del animal, dependiendo de su tamaño y ubicación", explican especialistas citados por el Laboratorio de Cornell. Además, advierten que estas lesiones pueden abrirse y provocar infecciones bacterianas secundarias, aunque lo habitual es que el proceso se resuelva por sí solo en un plazo de entre cuatro y ocho semanas.
Vías de contagio y recomendaciones
El virus se transmite entre ardillas por contacto directo con saliva o secreciones de animales infectados, o a través de comederos de aves compartidos. Según Shevenell Webb, bióloga del Departamento de Vida Silvestre de Maine, estos dispositivos pueden actuar como puntos de contagio cuando varias ardillas se alimentan en el mismo lugar.
"Es como cuando tienes una gran concentración de personas. Si alguna está enferma, y se trata de algo que se propaga fácilmente, otras se van a contagiar", declaró Webb al diario Bangor Daily News. Por ello, los expertos recomiendan retirar temporalmente los comederos si se detecta presencia de ardillas enfermas en la zona.
Las autoridades también desaconsejan capturar o manipular a estos animales. Aunque su aspecto sea alarmante, la fibromatosis no se transmite a humanos, aves, perros ni gatos, y en la mayoría de los casos las ardillas se recuperan sin intervención veterinaria.
Comparaciones con otros casos recientes
Este episodio se suma a otros avistamientos recientes de fauna silvestre afectada por enfermedades víricas en Estados Unidos. En Colorado, las autoridades pidieron hace unos días que los conejos domésticos no salieran al exterior debido a casos de papilomatosis en conejos silvestres, conocidos en redes también como "conejos zombi".
En ambos casos, los expertos coinciden en señalar que se trata de virus específicos de especies concretas, con baja mortalidad y sin implicaciones para la salud pública.



