L D (EFE) Bild reproduce, además, la carta de "despedida" colgada en internet por el joven, en la que quedan claras sus ansias de venganza, especialmente del profesorado, al que responsabilizada de su situación.
Asimismo, aporta testimonios de ex colegas, que describen prácticas agresivas del asaltante en Halloween y similares y afirman que el día antes del asalto había merodeado por la escuela con un abrigo negro hasta los pies y aseguraba estar "buscando a Dios". Con esa misma vestimenta, así como con uniformes de camuflaje militares, se había representado a sí mismo en internet, armado hasta los dientes.
Una masacre
Bastian B. estuvo a punto de provocar una masacre, al irrumpir en su antigua escuela Geschwister Scholl de Emsdetten, donde estudian unos 700 escolares, con varias armas de cañón recortado, explosivos y un cuchillo.
Una profesora, un bedel y varios alumnos resultaron heridos de bala o al hacer explosión uno de los artefactos, mientras que una treintena de personas tuvieron asimismo que ser atendidas de asfixia por el humo de las detonaciones y gases lacrimógenos de la policía.
Los investigadores prosiguen las diligencias, a la espera de que la autopsia confirme si murió a disparos de su propia arma o por la explosión de uno de los artefactos que llevaba consigo. Los alumnos de la escuela, que recibieron atención psicológica inmediata, no reanudarán las clases regulares, sino que ocuparán la jornada en nuevas sesiones de terapia, tanto individuales como en grupo.
